Los que marcan los goles son los que suelen acaparar los focos, pero en la mejora evidente experimentada por el Villarreal después de la goleada encajada en el Nou Camp hay otro nombre propio que se debe escribir con mayúsculas y es el de Vicente Iborra.

El jugador de Moncada empezó la temporada siendo suplente en los tres primeros partidos de LaLiga ante Huesca, Eibar y FC Barcelona, pero fue precisamente tras el severo correctivo (4-0) en la Ciudad Condal cuando algo cambió. De hecho en aquel partido Iborra ya entró en el descanso apenas unos instantes después de encajar el cuarto tanto y aunque de poco o nada sirvió, por lo menos en la segunda parte el equipo no permitió que lo aplastasen. Aquel fue sin duda un punto de inflexión en el rol de Iborra ya que desde entonces ha jugado todos los partidos de LaLiga de titular y en el único que ha sido suplente, ante el Sivasspor en Liga Europa, tuvo que entrar en el descanso cuando el marcador era de 2-2 para acabar ganando por 5-3.

Es cierto que la irrupción de Iborra en el once inicial ha coincidido cronológicamente con algunos problemas físicos de Coquelin, pero no lo es menos que el valenciano le está ganando el pulso con creces al francés más allá de su estado estrictamente condicional. De hecho, en el empate a cero (0-0) cosechado en el Ramón de Carranza fue la única vez que los dos futbolistas coincidieron en el once inicial de Unai Emery.

La presencia de Iborra en las formaciones iniciales del conjunto groguet ha coincidido además de lleno con la racha de nueve partidos consecutivos sin perder con un balance de siete triunfos y dos empates a cero (0-0) alcanzada por el Villarreal hasta el momento. Las casualidades no existen y queda demostrado con cifras.

Iborra es el futbolista ahora mismo encargado de dotar de equilibrio al centro del campo de un Villarreal que con Parejo, Trigueros y Moi, así como con algún que otro atacante que en ocasiones se descuelga a la banda en función de la fase del juego, hace una clara apuesta por el fútbol ofensivo. Puede parecer un dato baladí, pero no lo es más aún si se tiene en cuenta que Vicente Iborra con Unai Emery fue un futbolista que en el Sevilla tuvo un papel importante, pero en muchas ocasiones jugando en una posición mucho más adelantada que la actual. No es ninguna mentira decir que Iborra llegó a jugar un buen número de partidos casi como segundo delantero, una demarcación en la que su potencial en el juego aéreo a la hora de prolongar balones e incluso de mantenerlos cuando el equipo estaba en situaciones comprometidas o se veía obligado a jugar más directo le fue de gran utilidad.

Esa es precisamente una de las cualidades que más destacan en el futbolista de Moncada que empezó de niño siendo delantero, pasó a centrocampista e incluso en alguna ocasión aislada en el Levante se le llegó a ver jugar incluso como central. Eso, unido a su jerarquía ha hecho que de momento le haya comido la tostada de todas todas a Coquelin, que llegó como fichaje estrella este verano procedente del Valencia, pero se ha encontrado con un futbolista que apostó por ir al Villarreal cuando venían mal dadas y el equipo coqueteaba con el descenso, y que se remangó para evitar una situación dramática.