El Villarreal despide 2020 con una dolorosa derrota que pone fin a su racha de 18 partidos (19 si se cuenta el aplazado por COVID ante el Qarabag que se le dio por ganado) sin perder. El KO empaña una parte inicial de temporada que se ha de considerar positiva porque el equipo viene de donde viene, pero es un ‘bajonazo’ en toda regla. Duele el revés porque aunque el equipo mantiene sus opciones de acabar entre los cuatro primeros intactas, se cosechó ante un rival directo que te superó y que fue mucho más efectivo más allá de que su triunfo tuviese una pequeña dosis de polémica. Habrá que hacer algo de autocrítica.

La primera jugada clave ha llegado en el minuto 7 de encuentro cuando una progresión por banda izquierda del conjunto local ha finalizado con un disparo a las nubes de Acuña. Inicialmente los propios jugadores sevillistas han cogido la pelota y se han ido al córner para sacar porque la pelota ha tocado en Foyth, pero pocos se han dado cuenta de que el esférico había impactado en la mano del argentino ahora reconvertido a mediocentro. Soto Grado ha esperado indicaciones del VAR, desde donde se le ha requerido para ir a ver la jugada en el monitor y tras hacerlo ha decidido sancionar el penalti. Técnicamente es cierto que la pelota impacta en la mano, que está en una posición que se puede considerar «antinatural» y que agranda la silueta del jugador ‘groguet’, pero no lo es menos que el balón, aunque no hubiese dado en la mano de Foyth, se habría ido a las nubes. Se puede pitar penalti y se ha pitado, pero con los precedentes recientes de Umtiti y Vezo uno ya no sabe a que atenerse. Lucas Ocampos ha transformado la pena máxima con solvencia (1-0).

El Villarreal, tras el tanto, ha querido dar un paso al frente y aunque no la ha monopolizado, sí se ha hecho con la posesión de pelota de forma mayoritaria, si bien es cierto que no ha podido convertir ese ‘dominio’ en ocasiones claras de gol. Pedraza, titular como lateral zurdo por delante de Estupiñán, ha aparecido bastante, pero casi nunca ha ganado línea de fondo y por contra el Sevilla, amparado más en alguna acción a balón parado y en alguna salida rápida por banda, sí que le ha metido el miedo en el cuerpo a un Asenjo que ha realizado una buena intervención a remate de Diego Carlos.

En el descanso Emery ha deshecho su apuesta inicial por el 1-4-4-2 y ha dado entrada a Yeremi para que jugase en línea ofensiva junto a Fer Niño (algo lento en la única ocasión quejha tenido) y Gerard Moreno. En el vestuario se ha quedado Foyth que había sido el elegido inicialmente para dar equilibrio en el centro del campo, pero a quien se le han visto un poco las costuras con la pelota.

Con Parejo ya en el vértice más retrasado del recuperado triángulo en la medular, el Villarreal ha buscado a Yeremi en los primeros minutos del segundo acto y el descaro del canario al menos ha generado dos combinaciones peligrosas por banda izquierda, pero en este tipo de partidos las imprudencias se pagan y acto seguido un exceso de confianza de Rubén Peña con el equipo desplegado ha supuesto una recuperación de Ocampos, un pase en produndidad al espacio y una galopada de En-Nesyri que el atacante sevillista ha aprovechado para plantarse solo ante Asenjo y batirle (2-0). Ha sido el tiro de gracia porque aunque todavía quedaban muchos minutos por delante, el golpe anímico ha sido brutal y hay que admitir que el Sevilla es un equipo sólido y compacto.

Emery aún ha echado mano de un Chukwueze que en una doble ocasión junto a Pedraza -tras una excelente diagonal- ha podido reducir distancias en el marcador, pero en ambas acciones los atacantes del Villarreal se han topado con un acertado Bono que ha evitado el gol. Es el acierto en las áreas otro de los factores desequilibrantes en este tipo de choques y ahí de nuevo han ganado la partida los de Nervión.

El Villarreal al final ha inclinado el campo, pero lo ha hecho de forma infructuosa ante un Sevilla que ha crecido a medida que ha visto la orilla más cerca.

FICHA TÉCNICA

2 - Sevilla: Bono; Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos, Acuña; Jordán (Gudelj, m.88), Fernando, Rakitic (Óliver Torres, m.76); Suso (Munir, m.63), En-Nesyri (De Jong, m.88), Ocampos.

0 - Villarreal: Asenjo; Rubén Peña, Raúl Albiol, Pau Torres, Pedraza; Trigueros (Bacca, m.82), Foyth (Jeremy Pino, m.46), Parejo; Gerard Moreno, Fer Niño (Chukwueze, m.63), Moi Gómez.

Goles: 1-0, M.8: Ocampos, de penalti. 2-0, M.53: En-Nesyri.

Árbitro: César Soto Grado (C. Riojano). Amonestó al local Fernando (m.38) y a los visitantes Foyth (m.7), Trigueros (m.76), Parejo (m.88) y Bacca (m.90).

Incidencias: Partido de la decimosexta jornada de LaLiga Santander, disputado a puerta cerrada en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Césped en buen estado.