De la sanción no le podía salvar nadie. Una agresión, por leve que sea, con el partido recién terminado, trae sus consecuencias. Iñigo Martínez le propinó un sopapo a Sergio León nada más sonar el pitido final del choque que enfrentó a Levante UD y Athletic Club en el último duelo liguero. Ahora, el Comité de Competición ha dictado sentencia: Cuatro partidos de sanción.

Díaz de Mera lo tuvo claro en el acta:

"En el minuto 90 el jugador (4) Martinez Berridi, Iñigo fue expulsado por el siguiente motivo: Una vez finalizado el encuentro y estando todavía en el terreno de juego, golpeó con su mano en la cara a un adversario con uso de fuerza excesiva. Este hecho fue comunicado a ambos delegados en el túnel de vestuarios, ya que el jugador implicado había abandonado el terreno de juego".

En cualquier caso, está por ver si desde el club vasco se solicita la cautelar para poder disputar el partido copero.