Un solitario gol de uno de los jugadores jóvenes más talentosos del fútbol español como es Yeremi Pino en el minuto 79 de partido le dio al Villarreal un triunfo que le permite asaltar la sexta plaza de la clasificación (plaza de acceso directoa Europa League) y que le posibilitará llegar a la histórica cita de vuelta de semifinales de Europa League ante el Arsenal en el Emirates del jueves (2-1 en la ida) con la moral a tope y las piernas de muchos, frescas.

Una pancarta con el lema 'Nuestra historia, nuestro sueño, nuestro momento' cubría la grada central, desierta, de la Cerámica. Resume a la perfección el sentir de un club, de una afición y de 'tot un poble' (como dice su himno) en la fase clave de una temporada que puede ser histórica a tenor de lo visto hasta ahora y de lo demostrado también ante el Getafe pese a jugar con un equipo plagado de no habituales.

Unai Emery, con la mente puesta en la cita continental pero sin descuidar tampoco el campeonato doméstico, dio descanso a buena parte de sus pesos pesados de inicio.

Tras una primera mitad muy equilibrada en la que sería injusto no admitir que el Getafe cortocircuitó por momentos al conjunto groguet, la acción clave del choque llegó a falta de diez minutos para la finalización cuando el talentoso futbolista canario, que apenas llevaba diez minutos sobre el césped, aprovechó un par de acciones ganadas en un balón directo para anotar un tanto que vale su peso en oro. Yeremi cruzó la pelota con tranquilidad y efectividad para decantar el choque (1-0 en el 79').

Pese al tanto el Getafe, siempre vivo en el partido, aún tuvo en los últimos minutos la posibilidad de empatar en un golpe franco lanzado por el valenciano Timor y que se fue desviado por poco antes de que Bacca, ya en tiempo de descuento, estuviese también muy cerca de anotar el 2-0 en una acción de dudas entre la defensa y el guardameta de un conjunto azulón que, con Kubo sobre el césped durante los últimos minutos -el nipón sabrá si eligió bien en enero-, sigue sin atar su permanencia y no puede respirar.

El Villarreal, por su parte, tiene motivos de sobra para soñar en vísperas de una cita histórica porque la unidad A está descansada y la B compite a las mil maravillas. Endavant!