Al Submarino le salió el plan perfecto

Gerard Moreno y Capoue derribaron a un Valladolid que tuvo sus ocasiones

Al Submarino le salió el plan perfecto

Al Submarino le salió el plan perfecto

Vicente Linares

Vicente Linares

Unai Emery, al más puro estilo John 'Hannibal' Smith del 'Equipo A', ha debido pensar al final del partido que le encanta que los planes salgan bien. Lo ha debido mascullar porque al Villarreal, pese a lo apretado del marcador, ha dado la sensación de que le ha salido todo según lo previsto para lograr un triunfo que casi le asegura un primer objetivo y le mantiene vivo en la lucha por los puestos de Europa League.

El contexto del partido era necesario para entender su desarrollo. Ambos equipos necesitaban ganar casi de forma imperiosa (el Valladolid para salir de la zona de descenso y el Villarreal para regresar a los puestos de Europa League) y Emery, quizás como consecuencia del patinazo ante el Celta o puede que sencillamente por una gestión lógica de recursos tanto aquel día como ayer, ha apostado de inicio por un once mucho más reconocible. De hecho, con Chukwueze y Foyth lesionados, y Mario y Rulli sancionados, uno piensa que esa formación se puede asemejar mucho a la que presente Unai en la final de Gdansk ante el United.

El Villarreal es cierto que no ha entrado mal en el partido y la muestra más evidente de ello han sido dos llegadas de Pedraza por banda izquierda muy peligrosas. El cordobés ha entrado como cuchillo caliente en mantequilla y eso le ha bastado para servir un pase de la muerte que Moi ha rematado excesivamente cruzado con la zurda. Ha sido la mejor oportunidad en la primera parte de un Villarreal que también se ha aproximado en una combinación en la que a Alcácer le ha faltado fe para chutar con la zurda. Un 'killer' como él, si andase sobrado de fe, le habría pegado a gol, seguro, pero en esta ocasión ha preferido sacar un pase atrás que no ha encontrado rematador. El Villarreal necesita que Paco recupere el instinto, si puede ser, en un plazo de dos semanas.

Apenas esas dos llegadas claras acreditan que la primera parte del Villarreal no ha sido excesivamente efectiva en fase ofensiva, si bien hay que matizar que el Valladolid jugándose la vida y en su campo se ha quedado también en un remate al que le ha faltado algo de rosca de Roque Mesa.

Así se ha entrado en el segundo acto, con un panorama de esos en los que los clásicos dicen que se «impusieron las defensas». De hecho en la fase inicial de ese segundo periodo, sobre todo por parte grogueta, ha dado la sensación por momentos de que el plan de partido pasaba por madurar el choque hasta que el Valladolid, fruto de su imperiosa necesidad, se desordenase y dejase unos espacios que aprovechar.

Hasta que Sergio ha introducido las primeras modificaciones variando su disposición táctica con la entrada de Alcaraz y Guardiola, el equipo groguet tan solo ha creado peligro en una acción en la que Alcácer, de nuevo más asistente que finalizador, ha pisado una pelota para que Pedraza disparase duro llegando en carrera. La pelota no se ha escorado y ha sido repelida por Roberto de forma solvente.

Era obligatorio que uno de los dos diese un paso al frente y lo ha hecho el más acuciado por la necesidad hasta el punto de que Asenjo ha tenido que evitar el 1-0 en el 58 ante El-Yamiq en una acción en la que el central local ha arrancado con fe hasta plantarse solo ante el meta palentino, que ha aguantado lo suficiente para desviar el remate con acierto. Ha sido una acción clave.

El Valladolid empezaba a soltarse y paradójicamente ha sido entonces cuando han conectado los dos internacionales del Villarreal que tienen casi asegurada su presencia en la Eurocopa. ha sido Pau quien ha superado una línea en conducción y ha lanzado un pase a la espalda de la defensa del Valladolid que Gerard Moreno ha gestionado a la perfección para rotar sobre sí mismo, salir hacia su izquierda y hacer el 0-1 (67'). Ha sido el gol 55 del atacante catalán en liga en la entidad grogueta, lo que le permite superar a dos mitos como fueron Forlán y Rossi. El dato habla por sí solo.

Ante un Valladolid hundido en descenso ya ansioso y casi casi desquiciado, Capoue ha aprovechado un error en la salida local para llegando desde segunda línea ajustar un disparo a la base del palo en el 90' (0-2) y rubricar un triunfo que asegura virtualmente la séptima plaza. A seguir.