A Mandayo le faltan horas en el día. Además de jugar al fútbol y de crear vídeos, estudia Terapia Ocupacional y ejerce de míster con los prebenjamines del Victoria. «Me intento organizar bien. Tengo planificado hora tras hora lo que tengo que hacer. Si se te va un momento, ya no eres capaz de hacerlo todo», explica. Relata cómo estas últimas semanas han sido una locura. Llamadas, entrevistas, entrenamientos, grabaciones, prácticas de la carrera... «no hay tiempo físico», concluye el jugador.

A raíz de la eliminatoria de Copa del Rey, los seguidores de Mandayo han aumentado: 40.000 entre TikTok e Instagram. Crece la popularidad, pero no la presión por el contenido que publica, aunque medita mucho su plan. Se inspira con otros creadores de contenido e, incluso, con situaciones que ha visto en noticias o libros. Generar las ideas es lo complicado. Trasladarlas del papel a la pantalla, con su espontaneidad, es tarea sencilla. «Le doy a grabar, y si me trabo o veo que no sale bien, vuelvo a hacerlo otra vez. Lo que salga en ese momento. Lo voy cortando, y lo que me parezca más gracioso lo intento comprimir en un minuto», sentencia Mandayo.

El Victoria CF, pese a llevarse una goleada en Riazor ante el Villarreal, jugadores como Mandayo se llevaron el recuerdo del partido e incluso de la camiseta de algún que otro jugador. El Tiktoker del conjunto gallego subió un video tras el partido, como es de costumbre, contando al detalle lo vivido en el día de ayer.