Cristian Cornejo, el enfermero que asistió al aficionado del Cádiz: "Volvía y se iba... Estuvo entre 10 y 15 minutos sin vida"

La emergencia médica que se vivió en el Nuevo Mirandilla el pasado sábado sigue sacando nuevos protagonistas que ayudaron a que la situación se resolviera de la mejor manera posible. Después del mensaje de ayer de la hija del hombre que se desvaneció en la grada, ahora, Cristian Cornejo, el enfermero que asistió al aficionado en mitad del encuentro contra el Barça, ha contado cómo fue todo en diversos medios de comunicación.

"Estuvo entre 10 y 15 minutos sin vida", expresó el sanitario al Diario de Cádiz. El profesional sanitario estaba viendo el partido en el Fondo Sur, la misma grada en la que el hincha sufrió la parada cardiorrespiratoria. El enfermero llegó el primero para ayudar al hombre.

Lo primero que vio fue "un hombre desplomado que se podía tragar la lengua, así que fue lo que hice, se la saqué para que no se ahogara y utilicé las manos para darle masaje cardiaco", relató Cornejo a Hoy por Hoy Sevilla.

Además, el sanitario tiene una férula en la pierna, pero le "dio igual correr" o subir las escaleras para socorrer al damnificado. "Aunque me dolía al caminar y correr, si hubiera tenido que ir a gatas, lo habría hecho; una vida vale más que una pierna", expresó.

La colaboración entre todos fue clave

Un minuto después de su intervención llegó el 061, que le aplicó al hincha tres descargas con el desfibrilador, que fue transportado desde el banquillo por Carlos Nogueira, fisio del Barça y por Ledesma que atravesó el campo con él.

El auxiliar médico reveló que "le pusimos una vía y con el médico del Cádiz nos estábamos comunicando". "Él ha sido el gran culpable de que saliera bien. El hombre estaba en fibrilación ventricular, no volvía en sí, volvía y se iba... ha habido momentos complicados. Finalmente ha salido bien", manifestó a El Desmarque.

El papel del cardiólogo

Además de la ayuda del 061, la Cruz Roja y Cristian también había un cardiólogo en la grada, Carlos Aranda, que trabaja en el Hospital de Badajoz, y que estaba viendo el partido en Tribuna. Rápidamente se desplazó a la zona donde estaba el afectado.

El enfermo relató a Canal Amarillo la actuación del cardiólogo como vital para sacar adelante al hombre desvanecido: "Pasaron 40 minutos en total, interminables, cuando el protocolo establece que pasados los 25 se dejen de hacer las maniobras de reanimación, pero la insistencia va por delante siempre del protocolo y eso ha sido clave. Gracias a Dios había un cardiólogo en la grada", concluyó.