Copa del Rey

El Valladolid dice adiós a la Copa ante el Alavés

Los vitorianos dan la sorpresa de la jornada - El Barça rozó el ridículo y necesitó la prórroga para ganar en Alicante

Redacción / Agencias

El Real Valladolid se sumó a la ya larga lista de Primeras eliminados al caer (1-0) en Mendizorroza ante un Deportivo Alavés que aprovechó la superioridad en el campo que dejó la roja a Fedal a los cinco minutos. El golpe para el Pucela fue aún mayor cuando en el 10' Sylla hizo el 1-0, rozando el 2-0 Arroyo. El Valladolid aguantó el chaparrón y tuvo hasta tres ocasiones claras por medio de Gonzalo Plata. El colombiano perdonó y en la reanudación le tocó sufrir de nuevo a los visitantes. Abde y Sylla rondaron la sentencia, mientras el Pucela se esmeró de nuevo para al menos morir en campo de un rival de inferior categoría.

La Real Sociedad doblegó a la UD Logroñés (0-1), alargando su buen estado de forma, y el Sevilla hizo lo propio ante el Linares (0-5), con tres goles de Youssef En-Nesyri y una alegría importante, para alcanzar la ronda de octavos de final de la Copa del Rey,

El equipo de Imanol Alguacil siguió con su buen momento, sin dormirse por las Fiestas o el parón por el Mundial, y resolvió por la mínima pero sin sufrir en Las Gaunas. El equipo riojano se vio pronto a merced de la calidad 'txuri-urdin' aunque no se fue del partido después del 0-1 de Robert Navarro a la media hora. Antes, la Real había avisado con una muy clara de Sorloth y alguna más de Brais Méndez. El internacional español estuvo en cada jugada con peligro, aunque el equipo local, bajo un bonito ambiente en la grada, se mantuvo de pie. Mikel Merino acumuló las ocasiones vascas del segundo tiempo, donde no hubo suspense pese al 0-1.

La Real, campeón de Copa en 2020, no despistó ni un centímetro y estará en el sorteo del sábado tras acabar con un Primera RFEF como hizo el Sevilla, refugiado en medio de su momento complicado en Liga y con tres goles de En-Nesyri, el tercero ya con el Linares entregado (0-5) por la pegada rival. En-Nesyri trajo el regalo de Reyes adelantado para un Sevilla que empezaba a adivinar una tarde copera de las complicadas. La mala inercia de los andaluces apareció en el campo del Linares pero el ariete marroquí voló para rematar el 0-1, como hizo ante Portugal en semifinales de Catar 2022. El delantero hizo el 0-2 dos minutos después, en el 40', cuando el equipo jienense cometió el error de irse arriba. En un momento, cuando los locales dominaban y el Sevilla apenas generaba peligro, sin Sampaoli porque fue expulsado a los 15 minutos por un Mateo Lahoz que seguirá acaparando titulares.

La puesta en escena del cinco veces campeón no había sido mala, con Suso llegando y sensación de peligro, pero Álex Sancris tuvo un par de ocasiones para los locales y el Linares sumó la posesión al guion favorable. Entonces, En-Nesyri dejó ese cabezazo y remató el pase de un Lamela que robó a Lolo González el balón del 0-2. Para el Sevilla fue una brújula importante y, aun sin su técnico en la banda, encontró el rumbo adecuado al partido, con un Linares que dio los últimos coletazos en la reanudación. El ataque visitante fue de nuevo contundente con el tanto en propia de Squadrone, el 0-4 de Lamela y la manita que rubricó En-Nesyri para encontrar alegría y goles en la Copa con los que dar respuesta a la crisis en Liga.

El Mallorca necesita la prórroga

Además, el Mallorca, que venía de un mal encuentro en Getafe, tuvo que sudar ante el Pontevedra para sellar su pase ya en el tiempo extra (0-2). Abdón Prats y un Muriqi que entró casi para la prórroga sentenciaron a los gallegos, tras 90 minutos de incertidumbre por la resistencia local en Pasarón. Ruiz de Galarreta y Grenier pudieron dar renta a los baleares en el primer tiempo, pero los chispazos visitantes no fueron suficiente. El Pontevedra, equipo de Primera RFEF, parecía tener el partido donde quería y, pese a la entrada de Lee Kang-In, el Mallorca no tuvo ideas en ataque. No le entró a Giovani ni a Abdón, pero no se resistió más el gol en la prórroga a los de Aguirre.

Atlético y Barça imponen la lógica

El Atlético de Madrid logró el pase a octavos de Copa del Rey de fútbol ante un Real Oviedo intenso y dominador que perdonó sus ocasiones al principi y pagó cara después la calidad de Griezmann, clave en los goles de Llorente y Pablo Barrios -uno en cada mitad- que dan la clasificación a los del Cholo Simeone (0-2).

El Atleti necesitaba el pase de ronda como el comer, y el que salió a comerse al Atleti fue un Oviedo que a punto estuvo de hacerle el lío a los colchoneros tras un robo de Viti que no materializó Obeng y despejó finalmente Witsel. Las más claras siguieron llegando para los oviedistas, que rozaron el tanto a balón parado en un remate franco de Tarín en el área y en una contra hilada por Lucas y Viti que Obeng llegó a empalar también en el área, pero la mandó alta.

Tras perdonar tanto los locales, los que no iban a fallar eran los de Simeone, que tiraron de fuegos artificiales con un magnífico pase de Griezmann a Llorente y un remate picado de este que sirvió para batir a Tomeu a la contra. Y, en la segunda mitad, con Griezmann mediante, llegó el zarpazo definitivo para cerrar la eliminatoria a favor de los rojiblancos: una combinación del internacional francés con Correa y Pablo Barrios -recién ingresados en el campo- sirvió al canterano para definir ante Tomeu y marcar el segundo y definitivo tanto visitante.

Por su parte, el Barcelona se clasificó para los octavos al imponerse por 3-4 en el estadio Rico Pérez de Alicante ante un heroico Intercity, que llegó a empatar hasta en tres ocasiones con un triplete de Oriol Soldevilla, pero que hincó la rodilla en la prórroga. Xavi Hernández no quería sorpresas por lo que puso en escena a un once bastante reconocible con varios titulares habituales y desde el primer momento el Barcelona buscó solventar la eliminatoria por la vía rápida con presión alta y rápida circulación de balón. Los visitantes se adelantaron con un tempranero gol de Araújo a la salida de un córner en el minuto 4, pero la locura iba a llegar en la segunda parte. Solde, empeñado en ponerle las cosas difíciles a los 'culés', empató en el 59, haciendo rugir al Rico Pérez.

El Barça reaccionó rápido y volvió a adelantarse en el 66 gracias a un tanto de Dembelé, pero los alicantinos volvieron a nivelar el marcador en el 74. Sin embargo, la alegría local fue breve: en el 77 Raphinha daba una vez más la ventaja al Barcelona. Cuando el partido llegaba a los minutos finales, el Intercity volvió a encontrar premio al aprovechar Soldevilla un error de Marcos Alonso para firmar el 3-3. Corría el minuto 86 y el encuentro se iba inevitablemente a la prórroga.

Allí terminó la heroicidad alicantina. Un remate en semifallo de Ansu Fati puso el definitivo 3-4 en el marcador en el tramo final de la primera parte de la prórroga, y el luminoso ya no se movió pese al apoyo de los 26.000 espectadores que se dieron cita en el coliseo que habitualmente acoge los partidos del Hércules.