DERECHOS LGBT

Jankto, un “valiente” que salió del gran armario del fútbol: “Por mera estadística, tiene que haber más gays en LaLiga”

La declaración de homosexualidad del jugador del Getafe, cedido en el Sparta de Praga e internacional checo, es la primera de un jugador de primer nivel en activo

Denís Iglesias

"Yo también quiero vivir mi vida en libertad, sin miedos, sin prejuicios y sin violencia. Pero con amor. Soy homosexual y ya no quiero esconderme". La declaración es del 13 de febrero de 2023. La hace un futbolista profesional: Jakub Jankto, internacional con su país, la República Checa, donde juega cedido por el Getafe. Es la liberación de un profesional de primer nivel que confirma la anormal represión que todavía existe en el fútbol de élite con la elección sexual de hombres que tienen en su mano un gran altavoz. 

Así lo entendió Josh Cavallo en octubre de 2021. Este jugador australiano del Adelaide United se convirtió en el primer profesional en activo en declarar abiertamente que era gay. En mayo de 2022 hacía lo mismo Jake Daniels, que milita en el Blackpool británico

Divorciado y padre de un hijo

Jankto tiene 27 años y lleva jugando al máximo nivel prácticamente desde que cumplió la mayoría de edad, pero no fue hasta ayer que se decidió a comunicar al mundo su homosexualidad. Lo hizo después de divorciarse de Marketa en 2021, su anterior pareja, con la que tenía un hijo. "Es un paso de gigante, tanto él como para el mundo del deporte en general. Es cierto que habíamos visto casos como los de Cavallo o Daniels, de ligas menores, valientes e importantes, pero Jankto supone dar visibilidad desde la primera línea de la élite", reflexiona para EL PERIÓDICO DE ESPAÑA Víctor Gutiérrez, el primer hombre deportista de equipo en salir del armario en España y actual secretario de políticas LGTBI del PSOE

El del jugador del Getafe, con el que tiene contrato hasta 2027, es un grito que sale desde el fondo del armario en el que todavía se encuentra el fútbol y que él describió en la publicación que compartió con sus seguidores. "Como todos los demás, tengo mis fortalezas, tengo mis debilidades, tengo una familia, tengo a mis amigos, tengo un trabajo que he estado haciendo lo mejor que puedo durante años, con seriedad, profesionalismo y pasión. Como todos los demás. Yo también quiero vivir mi vida en libertad. Sin miedos. Sin prejuicios. Sin violencia" aseguró Jankto, el primero vinculado con LaLiga que se atreve a dar el paso. 

Porque sigue siendo un acto de valentía, tal y como se refleja en algunas de las respuestas que recibió la publicación del Getafe con la que el club apoyó a su integrante. "Ojalá se recupere en lo que queda de temporada", "esperamos el parte de la lesión", "¿para qué tiene que decirlo?, después se quejan de los que hacemos chistes", son algunas de las lamentables respuestas que se generaron en una conversación social en la que también se pueden leer comentarios de apoyo y hasta de advertencia: Muy valiente, por su parte, en cuanto vuelva al Getafe, hay que tener cuidado con los cafres que hay en las gradas. Atentos a eso, RFEF".

La desgracia del pionero

A pesar de la declarada batalla a la homofobia de las instituciones deportivas, como ocurre con el racismo, esto no ha impedido que se sigan reproduciendo actos de violencia verbal. "Cristiano, sal del armario", tuvo que escuchar Ronaldo en un derbi contra el Atlético cuando militaba en el Real Madrid. Hasta no hace tanto, el "Guti, maricón" era frecuente en todos los estadios donde jugaba el madridista. Y cuando la UEFA ha tenido la oportunidad de dar un golpe sobre la mesa siempre se ha quedado a medias.

En junio de 2021, rechazaba la petición del ayuntamiento de Múnich de iluminar con los colores del arcoíris el Allianz Arena donde se iban a enfrentar Alemania y Hungría. Era una forma de rechazar las prácticas antiLGBT del gobierno de Viktor Orban. La FIFA, misma postura, al pasar por la exigencia de Catar y su prohibición de las banderas o cualquier símbolo que reivindicase la libertad sexual, tal y como recuerda Víctor Gutiérrez, responsable LGBT del PSOE.

Ante esta pasividad, son los futbolistas como Jankto los que toman la palabra para "animar al resto", como reivindicó el checo, demostrando que hay un largo camino por recorrer que inició a la fuerza Justin Fashanu, futbolista negro y gay que terminó quitándose la vida con 37 años. Fue objeto de un chantaje por el que se vio involucrado en un caso de abusos sexuales. Terminó suicidándose por el temor a no recibir un juicio justo en EEUU.

Todavía hoy pueden contarse con los dedos de una mano los futbolistas que han salido del armario y hasta Cavallo todos lo habían hecho después de retirarse. El caso más mediático fue el del exinternacional alemán Thomas Hitzlsperger, quien al poco de colgar las botas reconoció su homosexualidad. Su autocensura fue tal que admitió en una entrevista que "solamente en los últimos años tuve claridad acerca de que prefería vivir con un hombre, pero quiero impulsar la discusión sobre el homosexualismo en el deporte profesional".

Las palabras definen perfectamente el carácter de tabú que todavía sigue teniendo que un jugador como Jankto se defina como gay. "Eres valiente", aseguró Claudio Marchisio, exinternacional italiano. "Nada cambia para nosotros. ¡Vive tu vida, Jakub!", se leía en los perfiles de la selección checa y de su equipo, el Sparta de Praga.

"¡Respeto, hermano!", escribían algunos de sus compañeros en el vestuario del Sparta de Praga. La semántica de las declaraciones reivindica la utilidad del gesto de Jankto en mundo "a menudo tóxicamente masculino", como lo definía el comentarista Derek Rae. El entorno profesional, alejado del ruido de trolls cibernéticos, es con el que debe quedarse Jankto. 

Ayudar a otros a dar el paso

"Es un paso importantísimo, no solo porque es un jugador internacional por su selección que pertenece al Getafe, sino porque cambia el escenario del fútbol. Seguramente, su testimonio ayude a otros futbolistas a dar ese paso. Por mera cuestión estadística, en LaLiga tiene que haber más homosexuales que al ver el cariño del mundo del fútbol hará que desaparezcan los miedos", concluye Víctor Gutiérrez-

Él, como Jankto, abrió el camino para combatir la "todavía poquísima visibilidad que existe en los campos, donde cada semana escuchamos cánticos homófobos". Odio que combaten acciones como la de Jakub, un ejemplo, ya no solo para sus actuales compañeros, sino para todos los niños que vienen detrás.