ACTUALIDAD AZULGRANA

El Barcelona pagó al menos 1,4 millones al vicepresidente de los árbitros Enríquez Negreira

Los pagos investigados corresponden al periodo entre 2016 y 2018, aunque se habrían iniciado desde antes del 2003

La Fiscalía de Barcelona investiga a DASNIL 95 SL, una empresa de José María Enríquez Negreira, vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros desde 1994 hasta 2018, por corrupción entre particulares, según ha avanzado el programa Què t'hi jugues, de la cadena SER y ha confirmado EL PERIÓDICO, del grupo Prensa Ibérica.

La investigación se inicia a partir de una inspección fiscal por 1,4 millones pagados por el Barça a la empresa entre 2016 y 2018. Exaltos cargos del Fútbol Club Barcelona y Enríquez Negreira ya han declarado ante la fiscalía. Fuentes de esta institución han asegurado a este diario que las diligencias de investigación (124/22) se incoaron el año pasado. Tras los seis primeros meses de pesquisas, el pasado mes de octubre se prorrogó el periodo para poder esclarecer si se ha cometido o no delito.

En estos momentos, siempre según las mismas fuentes, el asunto está en manos de la policía, que está acabando de recopilar las pruebas para que la fiscalía decida si se presenta o no denuncia o querella en los juzgados y concretar los delitos que, en su caso, se podrían haber cometido. La investigación de la fiscalía se ha acotado a la época de Bartomeu, pues los pagos anteriores no se pueden rastrear porque el delito ya habría prescrito.

El expresidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, ha asegurado a la cadena SER que estos pagos se remontan antes de 2003, cuando la junta de Joan Laporta llegó al club azulgrana, aunque algunas fuentes sitúan estos pagos en la época de Joan Gaspart. Sandro Rosell corrobora esta versión, Gaspart no recuerda este desembolso y Laporta ha declinado realizar declaraciones, aunque el Barça ha emitido un comunicado. Los pagos se interrumpieron en el 2018, según Bartomeu por un tema de recortes de gastos.

Sin documentación

Enríquez Negreira ha asegurado que no hay documentación porque su trabajo consistía en asesorar verbalmente al club azulgrana, entre otras cuestiones, sobre cómo debían comportarse los jugadores ante cada árbitro. El club azulgrana pagó a DASNIL 95 SL las cantidades de 532.728,02 euros en 2016, 541.752 euros en 2017 y 318.200 euros en 2018. En junio de 2018, el Barça paga la última factura, una fecha que coincide con la constitución de un nuevo CTA y con la salida de Enríquez Negreira del Comité.

Enríquez Negreira era el propietario de DASNIL 95 y su hijo, Javier Enríquez Romero, era su administrador. El padre manifestó a los inspectores de Hacienda que el Barça le pagaba por asesoramiento verbal, pero el hijo mantuvo que sí entregaba informes concretos a los responsables del club.

Sin favorecer al Barça

En sus versiones los ejecutivos azulgranas sostienen que las facturas corresponderían a informes técnicos que recibían de Javier Enríquez Romero, hijo del exárbitro, y administrador único de DASNIL 95 SL desde 2004 hasta 2019. Estos informes se entregaban a los responsables deportivos del primer equipo y del filial, según la versión de estos ejecutivos. Las diligencias de investigación general siguen abiertas.

Enríquez Negreira ha explicado que nunca favoreció al Barça en ninguna decisión ni designación arbitral y que su trabajo consistía en asesorar verbalmente al club azulgrana. Según su explicación, el excolegiado recomendaba al Barça cómo debían comportarse los jugadores delante de cada árbitro. Es decir, qué podían y qué no debían hacer dependiendo del colegiado designado para los partidos. "Que todo fuera neutral", reconoció ante la Agencia Tributaria. De hecho, cuando ya no cobraba del Barça, Enríquez Negreira siguió insistiendo en la necesidad de contratar sus servicios, por ejemplo para controlar aspectos como el VAR.

Acciones legales

El comunicado del FC Barcelona admite que "el club contrató en el pasado servicios de un consultor técnico externo, el cual suministraba, en formato vídeo, informes técnicos referidos a jugadores de categorías inferiores del Estat español para la secretaria técnica del club".

"Adicionalmente, la relación con el mismo proveedor externo se amplió con informes técnicos relacionados con el arbitraje profesional para complementar información requerida por el cuerpo técnico y del filial, una práctica habitual en los clubs profesionales". Y añade: "El FC Barcelona lamenta que esta información aparezca justamente en el mejor momento deportivo de la presente temporada". El club dice que se reserva el derecho de emprender acciones legales a quien atente contra la imagen del club.

Bartomeu tiene otros dos frentes judiciales abiertos. Uno de ellos, el más avanzados, es el Barçagate, en el que un juzgado investiga la presunta contratación irregular de un grupo de empresas para, bajo la cobertura de monotorizar las noticias del club azulgrana en las redes sociales, crear perfiles falsos para criticar a los oponentes a la junta directiva de Bartomeu, a periodistas y a jugadores del primer equipo de fútbol. El último informe de los Mossos al respecto era sobre el presunto pago a dos comunicadores, a través de terceras empresas, para defender la reputación del exmandatario del Barcelona. La causa continúa su trámite y todavía se está tomado declaración a testigos. No se descarta que Bartomeu solicite en un futuro declarar de nuevo.

El otro asunto sobre Bartomeu lo lleva también la fiscalía y se abrió a raíz de una denuncia del Barça contra Bartomeu por presuntamente pagos sin justificar. En concreto, el desembolso de comisiones por traspaso de futbolistas, entre ellos Antoine Griezmann y Malcom, abonos de honorarios considerados excesivos a abogados, alguno de ellos vinculado a un jugador, el Espai Barça, el posible fraccionamiento de pagos y la creación de empresas para formalizar desembolsos. La fiscalía prorrogó hace poco el plazo para concluir estas diligencias y así poder decidir con todos los elementos de prueba si presenta o no denuncia o querella.