Pasaporte verde para entrar al fútbol

Los clubes y la Generalitat ya estudian el regreso a los estadios y explorarán esta posibilidad en su comisión de trabajo

Una imagen de la vuelta a los campos de la afición del Valencia CF

Una imagen de la vuelta a los campos de la afición del Valencia CF / SD

Rafa Marín

Rafa Marín

El misterio continúa. A las puertas de que el Valencia CF lance su campaña de abonos, la Generalitat lo tiene claro. Los aforos de los estadios se decidirán apurando plazos y estarán supeditados a la evolución de la pandemia y de la campaña de vacunación. También a lo que se decida en la comisión de trabajo que anunció ayer el president de la Generalitat, Ximo Puig, junto a los presidentes de los clubes de Primera División de LaLiga Santander de la Comunitat Valenciana (Elche, Villarreal, Levante y Valencia) y el Valencia Basket.

Estos clubes, que como en el caso del de Mestalla lamentaban de puertas para adentro la falta de comunicación, trabajarán codo con codo con la Administración autonómica para tratar no solo el tema de los aforos, sino también para fomentar las vacunaciones entre los jóvenes y para establecer las medidas de protección contra el coronavirus.

En la reunión entre los presidentes no se habló de cifras concretas de aforo. Y es que la Generalitat tiene la experiencia de año y medio de gestión de la pandemia y sabe que dar una cifra ahora sería precipitarse demasiado, máxime con las cifras en alza que actualmente padece la Comunitat.

En la reunión no se habló de aforos, pero la realidad es que con la normativa vigente solo pueden entrar a los campos un máximo de 3000 espectadores. Si no cambia la cosa, por ejemplo, así será el Trofeu Taronja

En la campaña conjunta con los clubes, por cierto, participarán jugadores para impulsar la vacunación y la concienciación de los jóvenes frente a la covid. Además se pondrá en marcha un grupo de trabajo para determinar, siempre en condiciones de máxima seguridad y en función de la evolución de la pandemia, el regreso de los aficionados a los partidos de cara a la próxima temporada.

Los presidentes solicitaron a Puig poder volver a la normalidad, pero de momento hay que esperar. La clave, más que en los datos de incidencia de la pandemia, pasa por la evolución de la vacunación. La inmunización es una garantía de seguridad y, en otros países ya se está utilizando el pasaporte verde europeo de vacunación para permitir el acceso a los campos y a grandes eventos, así como para dejar entrar por sus fronteras sin más pruebas ni cuarentenas. Por ello, Ximo Puig certificó que este asunto «estará sobre la mesa del grupo de trabajo, aunque no es tan sencillo, ya que tiene sus complicaciones de carácter legal y hay que armonizar al máximo estas decisiones. Es una idea que ya se ha comenzado a usar en otros países europeos y como mínimo hay que explorarla».

Colaboración clubes-Generalitat

El president agradeció la «magnífica colaboración de los clubes para generar una alianza en favor de la vacunación y en este proceso de reencuentro emocional que significa la vuelta a los estadios. El fútbol y el baloncesto atraen a muchísimas personas y a muchos jóvenes, por eso es fundamental realizar una campaña conjunta para favorecer la vacunación y la concienciación de los jóvenes para superar la pandemia».

El responsable del Consell aseguraba que «falta un mes y hay que ver cómo evoluciona la pandemia, pero nuestra voluntad es que haya el mayor número de público posible y que las condiciones lo permitan siempre desde la máxima seguridad. Lo prioritario para todos es la superación de la pandemia».

Puig ya anunció como medida que en los campos se utilice la mascarilla y «durante este mes tendremos tiempo de hablar de aforos y de las condiciones de seguridad a establecer para que todos los espectadores puedan ir al fútbol o al baloncesto con las máximas garantías posibles. Por ello es de agradecer la magnífica voluntad por parte de los clubes para hacer de esta operación de reforno al fútbol una operación de éxito» y de concienciación general para superar la pandemia».