OPINIÓN / ESPECIAL CENTENARIO CD CASTELLÓN

Una forma de entender la vida (1922-2022)

Llegamos a este 2022 con algunas cicatrices pero también con la fórmula, ya testada, de la eternidad. Porque el albinegrismo se transmite de generación en generación

Así se celebró el último ascenso a Segunda División

Así se celebró el último ascenso a Segunda División / Gregorio Marrero

Jordi Bruixola Ruiz

El Club Deportivo Castellón no lo ha tenido nada fácil en su primeros cien años de vida. Llegamos a este 2022 con algunas cicatrices pero también con la fórmula, ya testada, de la eternidad. Porque el albinegrismo se transmite de generación en generación. Es imposible romper esa cadena de la vida. La mayor ilusión de una familia es comprobar cómo los más pequeños siguen el ejemplo de sus antepasados y ya se prepararan para seguir divulgando con orgullo los valores y la historia del Club.

Es absolutamente reconocible la ciudad de Castellón en un día de partido. Multitud de aficionados, llegados de toda la provincia, familias enteras, camisetas de distintas temporadas, emoción, nervios y toda una serie de particularidades que sirven para anunciar que el CD Castellón tiene un compromiso con su gente primero en Sequiol y luego en Castalia. Así ha sido, de forma ininterrumpida, durante 100 años. Y así lo seguirá siendo por muchos años más.

Nosotros llegamos al Club en 2017. Han sido cinco años de enormes alegrías y también de decepciones. Pero sobre todo de muchas dificultades y con muy poca ayuda ‘estratégica’. Este deporte llamado fútbol se caracteriza claramente por premiar la buena gestión, el sentido común, el esfuerzo y la humildad y por supuesto, la cohesión del grupo. Es evidente que por momentos lo conseguimos. Esta buena gestión lo corrobora tan sólo repasando que en 2018 estábamos jugando contra el Buñol, Recambios Colón, Rayo Ibense entre otros, convirtiéndonos en la gran atracción de la categoría, e incluso generando albinegrismo llenando los campos de Almazora o Borriol, y que en tan sólo 24 meses, en 2020, ya nos enfrentábamos al Espanyol, Zaragoza, Sporting, Mallorca… todo un éxito teniendo en cuenta de dónde veníamos y de dónde habíamos recogido el Club.

El factor diferencial del CD Castellón es sin duda la afición. En la España futbolística reconocen claramente el grito de Pam Pam Orellut, el estadio de Castalia, la torre Maratón, la camiseta albinegra y el enorme sustento que la afición le ha dado al Club en todos sus años de historia. La mejor noticia es que estas señas de identidad todavía siguen siendo los valores que identifican este club centenario. Ser del CD Castellón no es sólo ser de un equipo de fútbol. Diría que representa una manera de comportarse, una forma de entender la vida en la que no prevalecen las categorías, las victorias o los títulos. Una vida en ‘albinegro’.

En un día tan especial como hoy, 20 de julio de 2022, tiene que servir para recordar y agradecer a todas las personas que han colaborado y han ayudado en estos 100 años. Todos los jugadores, empleados y colaboradores, directivos, medios de comunicación y aficionados que han hecho posible llegar a esta efeméride. El mérito es de todos.

Quiero agradecer de forma especial a Pablo Hérnandez, Alfonso Hérnández y a Ángel Dealbert que siempre creyeron en el proyecto que les presenté desde el inicio. A Carlos Montesinos por todo su esfuerzo, su enorme dedicación y su talento. A Javier Heredia que nos ayudó, entre otras cosas, a convencer a Vicente Montesinos a que se hiciera cargo del Club. Gracias Vicente por tu valentía, amor por el club y por la ciudad de Castellón. La historia siempre te guardará un sitio muy especial. Ahora toca disfrutar de este feliz cumpleaños. Lo mejor está por llegar.

PAM PAM ORELLUT!