Esto al final se arreglará, pero se avecina marejadilla con el tema del estadio con las permutas, la deuda con el Consistorio y demás, basta con escuchar a Salvo en la Junta del pasado 20 de noviembre. Si el Valencia CF lo debe, al ayuntamiento o a quien sea, pues lo tendrá que pagar. Otra gestión cuanto menos discutible de gestores anteriores, porque tener a toda prisa un estadio muy grande y a todo lujo era un problema de la ciudad, para sus eventos y finales de Champions, pero lo acabó siendo del Valencia CF. Y tan gordo que casi se le va la vida en ello. Llegados a este punto hay que ponerse manos a la obra y de entrada sería mejor no mezclar conceptos que puedan confundir al personal, por no decir generar crispación, porque si el Valencia CF ha de pagar es porque lo debe y punto, no porque sea dinero de los valencianos y no solo de los valencianistas. Porque si fuera solo de valencianistas, estarían en la obligación de reclamarlo igual. Además, tampoco se recuerda que nuestros queridos políticos consultaran a los ciudadanos si les gustaba o no la Formula Uno antes de comprometer tantos millones de euros, por no decir de la America´s Cup, que también era con el dinero de todos para disfrute -y negocio- de cuatro.