Ahora que la información es global, un aficionado al fútbol de cualquier lugar del planeta que vea los gráficos pensará que aquí en Valencia se ha hecho el equipo del siglo, que Peter Lim ha convertido este club en el nuevo PSG siendo como es el número uno de la Liga en cuanto a inversión en fichajes, cuando en realidad lo que ha hecho con Mendes es traerse cuatro chavales que prometen mucho y dos centrales no precisamente baratos para compensar la tremenda pérdida de Otamendi. Por eso hay que explicar que no, que esas cifras no son así, que en esa cantidad que pone al Valencia en la cima del gasto por delante de Madrid, Barcelona y Atlético están también los fichajes que no se podían pagar hace un año porque Lim todavía no había comprado el club. Y, por cierto, tan importante para el equipo va a ser que funcionen los jóvenes que han llegado este verano como los no tan jóvenes que lo hicieron el pasado. Va siendo hora.