Visto así, de la manera en que los futbolista simplifican las cosas, podría parecer que lo de Vietto fue un así te pillo y así te mato, cuando el futbolista estaba a punto de marcharse a otro club. Pero no, ya dijo días atrás en una entrevista a SUPER Marcelino, al que le vuelvo a enviar un fuerte abrazo, que las oportunidades no pasan por ahí, hay que estar atentos y tener las cosas muy claras y atadas para cuando se presentan esas oportunidades. En el caso del argentino, para qué decir que el Valencia ya desde el verano tenía el punto de mira fijado a la espera de que el Atlético diera el banderazo de salida. Lo mismo que con Cancelo, operación que se puso en marcha hace más de un mes y que puede cerrarse en días, semanas o quizá nunca.

Al final, tener aquí el primer fichaje a 3 de enero y escuchar al presidente del Valencia CF decir que están trabajando para mejorar todavía más la plantilla, al menos para intentarlo de verdad, es enviar al aficionado un mensaje de ambición que se echaba en falta para complementar lo que el equipo está haciendo en el campo. Es decirle que como mínimo la Champions no se va a escapar porque vamos a poner todos los medios y todos los recursos para alcanzarla. De Guedes hablaremos pronto.

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