El Valencia CF abre este miércoles de manera oficial la temporada del Centenario a la que llegamos en una situación difícil de imaginar hace apenas 18 meses, cuando el club se puede decir que tocó fondo con la espantada del señor Prandelli. Al final, dicen que no hay mal que por bien no venga y aquel caos sirvió para que el propietario Peter Lim devolviera a Layhoon Chan a su labor financiera en el universo Meriton y decidiera dejar el club en manos de personas que por experiencia y conocimientos pudieran tocar las teclas necesarias y reflotar el proyecto. Pocas veces se da una relación causa-efecto tan clara e inmediata, pero es que aquella situación, se mire por donde se mire, era kafkiana. A partir de ahí, Mateu Alemany, Anil Murthy y Marcelino García, que perfectamente podrían haber sido los modelos de la histórica camiseta y estrellas de la gala, han ido tomando decisiones unas veces con más acierto que otras, pero siempre sensatas, con criterio y un sentido, hasta llegar a lo que tenemos este miércoles 4 de julio.

Hoy el Valencia CF va a presentar una serie de actos e iniciativas para conmemorar estos cien años de valencianismo, unas cosas nos gustarán más y otras menos, pero todo se ha hecho con cariño, respeto y mucha dedicación. Es un buen momento para olvidar todo lo que nos ha dividido y disfrutar de un año que ha de ser excepcional. La lástima es que una fiesta como esta no se haya podido hacer coincidir con la presentación de la plantilla que defenderá esa camiseta del Centenario en la Liga, la Copa y la Champions League.

Los actos y celebraciones están ya en el programa y lo que falta es culminarlo todo con esa plantilla extraordinaria que debe estar a la altura de las circunstancias y ser el orgullo de todos los aficionados en este año tan especial. Todos sabemos perfectamente, y en el Valencia CF también, que la guinda a estos actos del Centenario sería culminar la temporada peleando por conquistar un título.

Más opiniones de Julián Montoro.