A penas han pasado cuatro días desde la final de la Copa y ya la tenemos liada de nuevo con el Barça. Allí, pese a que la rumorología sigue su curso, el presidente Bartomeu parece convencido de que su hombre es Valverde, a pesar de que la popularidad de ambos está en los niveles que está. Y claro, Valverde tiene un icono entre ceja y ceja no de ahora, sino desde que entrenó al Valencia CF, que es Parejo. Ya escuchamos a Mateu Alemany decir que los futbolistas tienen sus cláusulas y, a partir de ahí, hay una serie de factores que incluyen en que una operación se pueda hacer o no, básicamente la opinión de los futbolistas y lo que un club esté dispuesto a pagar. Viene a decir que para que se dé una salida no deseada, antes que nada el futbolista tiene que pedir que el club escuche propuestas, y después que a nadie se le ocurra venir con ofertas ridículas por jugadores que han demostrado lo que son, campeones de la Copa y jugadores Champions.

Tanto Parejo como Rodrigo están en el punto de mira del Barcelona. No quiere decir que se vayan a ir por mucho que el Valencia necesite vender, aunque sí que el Barça lo va a intentar y que está a la orden del día de que el capricho o lo que sea le puede costar una auténtica fortuna. Porque, en un mensaje dirigido o no al Barcelona, Mateu ya se ha encargado de airear que el club está obligado a vender aunque bastante menos lo que se esperaba en un principio, gracias sobre todo al brillante final de temporada del equipo. Donde solo se quería ver debilidad, el Valencia CF abre el mercado de verano muy fuerte.

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