El próximo entrenador no tendrá que preocuparse de la Europa League porque la suerte está echada. Aunque todos los rivales pierdan todos los partidos, aquí lo realmente complicado es que el Valencia CF sea capaz de ganar los dos que le quedan. De hecho, repasando los números, es lastimosa la manera en que el equipo se ha caído de las competiciones europeas por su propia incapacidad para mantener su portería a cero y sumar puntos. Estamos, pues, como el verano de Marcelino, sin Europa y con un proyecto que vuelve a arrancar, aunque de momento sin el nuevo Marcelino que quiere el máximo accionista. Con sus muchas cualidades pero sin sus pocos defectos. Que acepte trabajar con lo que le traigan y sea valiente a la hora de poner a los jóvenes que ya tiene la plantilla actual más los que vendrán.

En realidad, tampoco hay que ser Braveheart para jugársela con los jóvenes cuando esos jóvenes son gente como Carlos Soler, Ferran si no lo venden, Maxi Gómez, Guedes o Kang In Lee. Jóvenes sí, pero futbolistas que llevan ya dos y tres temporadas en la primera plantilla del Valencia CF. Una plantilla que no será para competir en la Youth League, también tendrá su gente experimentada a partir de los Gabriel, Gayà y quizá Rodrigo, eso nunca se sabe hasta el último día de mercado.