Aunque toda la atención se centra en la elección del próximo entrenador del Valencia CF, en un día como este no podíamos restar ni un gramo de protagonismo en nuestra portada a la entrevista con Hugo Guillamón, primero porque no todos los días ni todos los meses concede una entrevista un jugador del Valencia, y este chico ya lo es, y segundo por lo mucho que hay detrás de la apuesta o simplemente de la renovación de este atípico central que en el último mes ha sorprendido hasta al más agudo de sus críticos, que los tiene.

También al propio Valencia CF, que nunca lo había visto como central de primer equipo hasta que por pura necesidad no tuvo más remedio que ponerlo y el chaval respondió con una madurez muy poco habitual con esa edad y en esas circunstancias. Si hoy ha renovado y sigue vistiendo esta camiseta es únicamente por su propia convicción de que esto podía pasar, por la confianza en su fútbol, por su valencianismo y por la fe en que algo extraordinario podía pasar que cambiaría el destino. Mientras otros demuestran cada día que se quieren ir, él, que tranquilamente podía haber firmado meses atrás con otro club porque terminaba el 30 de junio, unicamente quería seguir. Si hay algo de justicia en el fútbol y en la vida, a este chico le tiene que ir bien por calidad y por lo claras que tiene las ideas.

Entrenador

Dentro de muy poco vamos a ver si tan claras tiene las ideas también el máximo accionista, si ha entendido lo suficiente la gravedad de la situación como para quedarse quietecito y apostar por el técnico que le ponen sobre la mesa. Será, seguramente, lo mejor que pueda hacer por el Valencia CF en estos momentos, no hacer nada. Tanto si es Javi Gracia, que tiene toda la pinta si ha conseguido resolver sus inconvenientes contractuales, como si fuera José Bordalás o incluso Aitor Karanka, al menos tendremos la tranquilidad de que son entrenadores serios, preparados, con cierta experiencia ya acumulada y que de una manera u otra encajan en lo que necesita este equipo para recuperar la competitividad. No responden todos al mismo perfil, pero sí tienen cada uno sus puntos fuertes para triunfar en un proyecto como el que se prepara aquí.

Si Peter Lim, porque no le convence ninguno o simplemente porque le da la gana, decide a última hora sacarse alguna otra carta de la manga, lo único que nos puede salvar del desastre es que la carta sea esta vez un triunfo. Para experimentos desde luego no está ahora mismo el Valencia CF y él debe ser el primero en saberlo.