Con la voz cortada y visiblemente afectado. Así ha hablado Quico Catalán de Ramón Vilar instantes antes del Levante-Athletic. El encuentro era lo de menos y es que el presidente ha mostrado la profunda tristeza que siente el club, él en lo personal como amigo y todo el levantinismo por el fallecimiento del consejero granota. "Es un día muy difícil porque se ha ido un amigo, un gran levantinista, un grandísimo consejero, un gran valenciano, una persona que amaba a su tierra, que ha hecho tanto por este club y la gente que hemos estado a su lado, desde esta mañana que su hijo me comunica la terrible noticia es difícil de entender. Anoche mismo en el grupo de whatsapp que tenemos de consejeros él enviaba un mensaje a las 21:30 y doce horas después te enteras de que de madrugada se fue y es difícil", ha señalado el presidente de la entidad.

Quico Catalán, minutos después, no ha podido aguantar las lágrimas durante el minuto de silencio que se ha llevado a cabo antes del inicio del encuentro entre el Levante y el Athletic en el Camilo Cano. Y es que el presidente había dejado claro que el fallecimiento de Ramón Vilar le deja sin un gran amigo. "Ramón tenía algo especial, todo el mundo le quería, era bondad, nobleza, un tipo que solo busca a el bien, el diálogo, el consenso, qué poco hablaba y cuánto aportaba, pero cuando hablaba era importantísimo. He perdido un gran apoyo, un tipo que con nuestra diferencia de edad él no sabe lo mucho que ha ayudado a este club en esta y otras etapas a través de su papel de concejal público. Era muy bonito verlo siempre con su insignia y su corbata del Levante, se va un gran hombre, un responsable de que el Levante tenga este futuro por delante. Una gran pérdida de verdad", explicó el presidente.