Campaña había estado otras veces preseleccionado, pero hasta este viernes se había quedado con las ganas. "No me lo esperaba para nada", reconoce ya con la camiseta de la Roja puesta. Se la había entregado minutos antes Paco Fenollosa mientras se ejercitaba en el gimnasio con sus compañeros después del partido en Sevilla. Una sorpresa. "Sabía que caía la posibilidad porque estaba en la preselección. Cuando he visto a Paquito Fenollosa ha sido ese momento de felicidad. El sueño que todo jugador español tiene y le gustaría cumplir. Que el presidente de honor del club te venga con esa noticia se agradece. Te viene la sonrisa de la felicidad".

Además de Fenollosa, también Quico Catalán fue expresamente a felicitarlo. El abrazo entre ambos no fue uno cualquiera. En la comitiva no faltaba prácticamente nadie: consejeros como Braulio Pastor, Miguel Ángel Ruiz y Pablo Sánchez, el director deportivo Manolo Salvador y el director de comunicación, Alberto Gil. No era para menos. Y es que en una horas el Levante ha cambiado la amargura del gol sobre la bocina de En Nesyri a la felicidad por el primer internacional granota desde El Galgo de Vallejo. "A pesar de no entrar en estas últimas en las que estaba preseleccionado, tenía claro que solo me quedaba una cosa, que era seguir trabajando. El trabajo se dice que al final tiene recompensa, así que estoy feliz", asegura.

Campaña, a la selección española

Campaña, a la selección española

La llamada ha llegado, además, después de unas semanas de ruido a su alrededor. El futbolista deslizó a nivel interno su deseo de cambiar de aires, su agente le ofreció a clubes ingleses como el Leeds y hasta el 5 de octubre el mercado está abierto. Su nueva condición de internacional eleva su caché, aunque el club sigue sin ofertas oficiales sobre la mesa.

Preguntado por las personas de las que se acordaba en este momento, Campaña enumeró una lista extensa: "A toda esa gente que siempre me sufre cada fin de semana cuando salgo alegre o mosqueado, a mi familia, novia, representantes, compañeros, gente del club... Sin ellos no sería posible. Al míster y el cuerpo técnico, que sin su confianza esto habría sido más difícil. Y a esa gente con la que he podido compartir mi vida y toda mi carrera desde que era un niño. Estoy contento de formar parte de la historia del club y de seguir los pasos de Domínguez, que también tuvo la oportunidad de ser internacional. Y ojalá sean muchas más".