El despegue de Dani Cárdenas

La visita a Ibiza devuelve al segundo portero que más para en la categoría a uno de los mejores momentos de su carrera

Cárdenas en la tanda de penaltis contra el Ibiza

Cárdenas en la tanda de penaltis contra el Ibiza / JM LOPEZ

Rafa Esteve

Rafa Esteve

Tras nueve temporadas de crecimiento en clave levantinista, Dani Cárdenas tiene las llaves de la portería del primer equipo del Levante a buen recaudo. El canterano, dos años después de su debut contra el Valladolid, es una realidad en el clima del Ciutat de València desde que se asentó bajo palos el curso pasado, en un pulso con Aitor Fernández que terminó venciendo para hacerse con la titularidad. Una vez disputadas once jornadas de competición en Segunda, el ‘1’ aterriza al partido en Can Misses siendo uno de los porteros del curso luciendo números positivos. Según la base estadística de LaLiga, es el segundo guardameta con más paradas totales (37) después de convertirse en una pieza inamovible para los suyos. Sin embargo, el duelo contra el Ibiza devuelve a Dani Cárdenas a uno de sus mejores momentos como profesional. Ya que, ante los ibicencos, realizó una actuación soberbia que le colocó definitivamente como el portero del futuro en Orriols.

El nacido en Terrassa, en su etapa en el filial, marcó un antes y un después en la final de los PlayOff de ascenso a Segunda B de la temporada 2017/2018. En la que fue una eliminatoria a ida y vuelta ante el Ibiza, el Atlético Levante afrontó el segundo asalto en Buñol tras caer en las Islas Baleares por la mínima y en el descuento de la contienda (1-0). Y después de llevar el partido a los penaltis, gracias a un tanto de Mongil en la segunda mitad del tiempo reglamentario, Dani Cárdenas se vistió de héroe no solo para sostener a los suyos en un momento de debilidad, sino para transmitirle fuerza y esperanza a su equipo para conseguir el ascenso a la antigua Segunda División B. 

El Ibiza arrancó la tanda marcando sus dos primeros lanzamientos, materializados por Cirio y Liñan, mientras que el filial levantinista marcó la pena máxima inicial a través de Juan Delgado y erró, mediante las botas de Mongil, la segunda. El tercer penalti fue transformado por los visitantes, y abrió un escenario donde el Atlético Levante se sumergió en un momento de crisis que fue acrecentado después de que Álex Gil fallase su respectivo disparo.  

Sin embargo, la figura de Dani Cárdenas irrumpió como una exhalación, para darle la vuelta al marcador de la tanda contra todo pronóstico. Después de que Terán mandase por encima de los palos el que se convirtió en el penalti definitivo, el canterano, posteriormente, se estiró para impedir el que hubiera sido el tanto del ascenso ibicenco de Abel, con una mano que envió el cuero al larguero, y adivinó el lado por el que tiró su lanzamiento De las Heras. Dos intervenciones que allanaron el camino a la Segunda B. El Hacen, Andreu y Manzanara hicieron el resto para que el filial levantinista convirtiese su sueño en realidad.

El filial levantinista, con Javier Olaizola a los mandos tras el ascenso de Paco López al primer equipo, quedó en primera posición aquel curso en Tercera División, pero la eliminatoria perdida ante el Calahorra le obligó al Atlético Levante a jugar dos rondas adicionales ante el Villalbés y el Ibiza. Dani Cárdenas, en la 17/18, fue importante bajo palos y realizó encuentros de mérito, siendo uno de los artífices del liderato de su conjunto.

Pero, en un momento de gran trascendencia, se agigantó para elevar al filial hacia la categoría de bronce del fútbol español. Cuatro años después de aquella inolvidable mañana, que dio comienzo a una trayectoria que sigue en fase ascendente, Cárdenas no solo es una realidad en el Levante, sino que es una garantía en la portería del Ciutat de València.