Empate y gracias

Al equipo de Javi Calleja le sonrió la suerte tras las derrotas de Las Palmas y Alavés. No obstante, el ascenso pasa por cambiar la imagen cuanto antes

Un punto recortado con el segundo puesto.

Un punto recortado con el segundo puesto. / LUD

Rafa Esteve

Rafa Esteve

Dos puntos obtenidos de los últimos nueve han mermado la escalada del Levante hacia el ascenso directo, que después de haber cosechado veinte partidos sin conocer la derrota, vive su tramo más crítico desde que Javi Calleja cogió los mandos del banquillo de Orriols. El empate en La Rosaleda abrió una jornada en la que el levantinismo volvió a estar pendiente de los enfrentamientos de sus rivales directos, sobre todo, después de obtener un punto que dejó un sabor agridulce y que empezó a despertar nerviosismo entre los que suspiran por que el Levante vuelva a estar entre los mejores la próxima temporada. No obstante, a los granotas, conscientes de que el desafío del ascenso pasa por recuperar su versión más competitiva, no solo les sonrío la suerte, sino que dieron gracias después de ver que la unidad conseguida contra el Málaga sirvió para recortar distancias con las posiciones que permiten subir a Primera de manera directa.

Tras finalizar la fecha treinta y uno de competición a tres puntos del segundo, el Levante cerrará la jornada actual a dos de la plaza en cuestión. Tenerife y Ponferradina le echaron un cable a los de Orriols para seguir creyendo, a pesar de la mala racha en la que están inmersos, en conseguir el ascenso directo. Las Palmas, entre los dos primeros clasificados desde la quinta jornada, perdió de manera estrepitosa en el derbi canario por cuatro goles a uno y su derrota en territorio tinerfeño le mandó a zona de promoción. El Alavés, que tuvo la oportunidad de hacer ‘sorpasso’ en la parte alta de la tabla y adelantar a los de Javi Calleja, sucumbió en El Toralín ante una Ponferradina que, en descenso, demostró que en Segunda División no hay rival fácil. Sobre todo, en un tramo del curso en el que los objetivos adquieren una importancia vital. Sin embargo, el gran beneficiado de los marcadores que se produjeron fue el Granada. El cuadro de Paco López asaltó la segunda posición después de conquistar el Carlos Belmonte en su enfrentamiento directo ante el Albacete. 

Pendientes del líder

Mientras el ascenso directo, por suerte, está a dos unidades de diferencia pese al empate en La Rosaleda, el Levante aún tendrá que estar pendiente del duelo de esta noche entre el Mirandés y el Eibar. Los armeros, líderes de la competición, podrían sacarle seis puntos a los levantinistas si vencen su compromiso. Muestra de que no todo es de color de rosa en el Ciutat de València y de que urge salir cuanto antes del bache: recuperando sensaciones positivas, reforzando el cerrojo en la portería de Dani Cárdenas y, sobre todo, siendo más acertados a puerta. La gran asignatura pendiente del equipo.