Aunque este sábado lo hace puntualmente, a Stuani no le importaría volver a Orriols en un futuro para quedarse. Porque está «muy orgulloso» de su paso por el Levante, como ahora, cree, debe estarlo la afición de tener a «uno de los mejores equipos de la categoría». Un rival del que no se fía ´su´ Racing, a pesar de la «racha negativa, que no crisis» por la que pasa.

Vuelve el ´Matador de Tala´ a Orriols. Imagino que tendrá ganas.

—Estoy bastante ansioso por jugar, porque supone volver a un estadio que me ha dado muchas alegrías; al Levante siempre lo recuerdo con cariño. Sin duda que va a ser especial, por el enorme aprecio que le tengo al club y por cómo toda la gente se portó conmigo.

—Seguro que serán muchos los compañeros que le han llamado en esta semana especial.

—Mantengo contacto con muchos; sobre todo con Munúa, con quien hablo constantemente. Siempre estoy pendiente de cómo les van las cosas, y ellos también siguen mis evoluciones. Y eso es muy lindo, después de haber compartido vestuario con unos compañeros a los tengo un grandísimo respeto y admiración.

—¿Hubo alguna posibilidad de seguir en el Levante?

—Estuve esperando al Levante bastante tiempo, porque acabé muy contento de mi paso por allí, pero al final no hubo acuerdo. Entonces apareció el Racing, que estaba muy interesado y llegaba la hora de definir, de tomar una decisión. Son cosas del fútbol, pero a lo mejor algún día toca volver. Es un equipo al que quiero mucho y le deseo lo mejor… como todo el mundo sabe.

—¿Tildaría la racha actual del Levante de crisis pese a mantener la cuarta posición?

—Ahora el Levante atraviesa por una dinámica diferente, que no es como la del principio de curso. La primera vuelta ha sido estupenda, siendo un fijo en la cuarta posición. Ha sido tan buena que pese a los últimos resultados negativos aún sigue en el mismo lugar. El levantinismo tiene que estar muy orgulloso de lo que están haciendo sus jugadores. Sin duda, es uno de los equipos más fuertes de la categoría, que ahora está pasando por una racha negativa, que espero que acabe pronto, pero que no sea contra el Racing. Ese vestuario está capacitado para salir de la situación actual, y de muchas más, incluso peores.

—¿Qué sensación social se vive en el Racing?

—Hay muchos problemas institucionales. Es un club en incertidumbre, no se sabe lo que sucederá. Ahora está en Ley Concursal, en manos de los administradores; y está buscando estabilizarse. Para ello es fundamental lograr la permanencia. Lo que nos queda a los jugadores es tratar de centrarnos en lo deportivo y no pensar mucho en lo que nos rodea; hay quien acumula un año y medio o dos años con problemas en sus salarios. Es un presente bastante complicado a nivel institucional. El objetivo es estar juntos, que afición y futbolistas echemos para adelante para superar esta complicada temporada.

—¿Los problemas económicos también han tocado su bolsillo?

—Mi salario va todo por parte del Racing. Llegué a Santander cuando ya estaban en concurso, y me aseguraron mi contrato. Pero me preocupa la situación por mis compañeros; sobre todo, los del año pasado, que lo han pasado mal, que están tirando adelante con mucha profesionalidad, ayudando para conseguir que el Racing siga en Primera División.

—En estos casos, el papel de la afición adquiere un protagonismo mayor.

—Está un poco dolida por todo lo que ha pasado, pero se está empezando a dar cuenta de que tienen que apoyar mucho al equipo. Nosotros lo estamos dejando todo para estar lejos del descenso y la afición lo sabe; van a estar a nuestro lado en todo momento.

—Le costó ser titular y ahora es fijo.

—Llegué prácticamente sin hacer pretemporada; fue difícil coger el ritmo. Estoy contento porque ya son nueve tantos con el Racing: vivo del gol, y estoy teniendo la suerte marcar en los últimos partidos, y que, además, esté sirviendo para conseguir muchos puntos en Liga.

—Cumple el guión; en el Levante también ´mojaba´ en Liga y Copa.

—En el Levante marqué 10 goles entre las dos competiciones. Este año llevo nueve; estoy contento y con ganas de superar el registro.

—¿Qué ha cambiado en el Racing de la etapa de Héctor Cúper al actual ´triunvirato´ de técnicos?

—Cúper proponía mucho esfuerzo y trabajo. El Racing es un equipo duro, eso lo tiene, pero nos costaba crear juego, tener posesión, y en eso hemos ganado. Seguimos siendo un conjunto fuerte, correoso, y a eso le hemos sumado más llegada, sobre todo en casa, y dominio del balón. Los entrenadores actuales nos han dado más tranquilidad y confianza.

—¿Qué diferencias ve desde la distancia entre el Levante de Luis García y el de Juan Ignacio Martínez?

—Es verdad que Luis García hizo un buen trabajo en el Levante, y eso ha ayudado. Además, el bloque lleva muchos años junto y sabe a lo que juega, y lo que es más importante, que es un vestuario unido, que es su gran arma. Pero está claro que Juan Ignacio también ha tenido que ver mucho en la cuarta plaza actual.

—¿A quién tiene pensado dar el primer abrazo en su reencuentro?

—Extendería los brazos y abrazaría a mucha gente a la vez. Tengo un aprecio muy grande a todos los compañeros, a toda la gente que rodea al Levante; será un honor volver a pisar el Ciutat de Valencia y seguro que me traerá buenos recuerdos por muchísimos motivos.

—Si marca, ¿lo celebrará?

—Ojalá pueda hacer algún gol, pero no lo festejaré por respeto a mis ex compañeros y al cariño que tengo a la gente del Levante. Hace menos de ocho meses estaba allí de maravilla celebrando la permanencia.

—El Racing llegará a Orriols tras una ´batalla´ ante el Valencia.

—Fue un partido intenso, con las pulsaciones muy altas. En nuestro campo es eso; somos un equipo que pelea, que lucha hasta el final y estuvimos a punto de ganar en la última jugada. Fue un encuentro muy extraño, movido, cambiante. Como una guerra con muchos lastimados.

—El 2-2 trajo consigo las sanciones de Toño y Domingo Cisma. Fue un empate agridulce.

—Tenemos sancionados, pero estamos preparados para dar el máximo. Una victoria que nos daría mucha vida en nuestro objetivo.