Joaquín Caparrós recuperará a su central y a su delantero de cabecera en el regreso liguero, el próximo día 24. Babá y David Navarro, ausentes en San Mamés, estarán en condiciones de enfrentarse al Villarreal, como revelaron las pruebas médicas que se les practicaron este lunes a ambos. Ni uno ni otro sufren lesiones de gravedad en la rodilla izquierda y el pie derecho, respectivamente, por lo que el actual descanso será suficiente para que dejen atrás sus problemas físicos.

Las molestias del delantero son consecuencia del exigente calendario de las últimas semanas, en las que el Levante ha llegado a acumular cuatro partidos en 14 días. La resonancia magnética a la que se sometió en Umivale expuso que el senegalés tiene un quiste articular en la parte posterior de la rodilla izquierda, provocado por la acumulación por la acumulación de líquido sinovial en la zona. Nada que no se pueda solucionar con una menor carga de trabajo y tratamiento durante las próximas jornadas. No es la primera vez que Babá padece esta dolencia, a la que tan acostumbrado estaba Koné.

Positivas fueron también las conclusiones de las pruebas médicas a Navarro. Este, con molestias en los postreros entrenamientos de la pasada semana, simplemente tiene un fuerte golpe en la planta del pie derecho y en los próximos días se incorporará a la disciplina de grupo. En su caso, a diferencia del de Babá, incluso podría disponer de minutos en el amistoso del jueves en Almansa. Ese encuentro servirá principalmente para que canteranos y futbolistas menos habituales tengan minutos. Quien no llegará a tiempo de jugarlo es Pallardó, en la recta final de la recuperación de su esguince de rodilla.