De nuevo, a la vieja usanza, el Levante apura el mercado para fichar a un delantero. Y es que es gol lo que buscan los granotas, justo lo que les ha faltado en las dos primeras jornadas. A pesar de que de salida los técnicos no se lo habían marcado como una exigencia, la preocupación por el arranque liguero y los problemas ofensivos han acabado dejando a las claras la conveniencia de hacer un esfuerzo por un estilete. Mendilibar cuenta con Barral y Casadesús a la espera de que Rafael Martins coja la forma y pueda confirmarse si puede ser o no el nueve de referencia que requiere el equipo y para el que está acreditado con su condición de tercer goleador de la Liga portuguesa. Sin embargo, el míster ya dejó claro que sería bienvenido «todo lo que nos mejore».

Después de que el pasado sábado Quico Catalán apretara el acelerador con una jornada maratoniana para fichar a un mediocentro como el Gato Silva y dar luz verde al traspaso de Diop por casi tres millones de euros incluyendo el fijo más las variables por objetivos, los esfuerzos se centraron ayer en la contratación de un delantero con el que apuntalar el equipo. Y es que, salvo giro inesperado, Pape se queda, motivo por el que el Levante va ya a tumba abierta a por un ´nueve´.

De aquí a que el mercado se cierre esta noche, el Levante confía en que fructifiquen las gestiones que a lo largo del día se intensificaron con un delantero que cuenta con el OK de Mendilibar y que lleva unos días a tiro. Se trata, en definitiva, de una operación de ultimísima hora por un jugador del estilo de los Caicedo, Koné o Martins que tan bien le fueron a los granotas y que esperan repetir con una jugada muy similar.

Como es habitual en sus fichajes y especialmente con los delanteros llamados a marcar diferencias, una vez más el handicap con el que juega el Levante es el económico. Quico no negocia su política de cumplir escrupulosamente el límite presupuestario de la LFP y de presentar números con superávits, por lo que la dificultad aumenta para cerrar la contratación de un artillero que de no llegar cedido a cambio de compartir su sueldo tendría el aliciente de llevarse una parte de un futuro traspaso, sin ninguna duda la ecuación más redonda en los últimos tiempos para los de Orriols.

Lo cierto es que a lo largo del verano desde el Ciutat se han sondeado a diferentes delanteros pese a lo temprano que se cerró el fichaje de Rafael. Encima de la mesa han estado nombres como los de Ibrahima, Kike Sola, Pierre Webó o Baptistao, amén de otros que también se tantearon. Sin embargo, los esfuerzos estaban ayer centrados en un objetivo que no había trascendido hasta confirmarse que no tiene sitio en su equipo, lo que lo convertía ipso facto en una posibilidad. En el Levante, eso sí, se ha vuelto a descartar la alternativa de desembolsar un traspaso a modo de inversión por alguno de los futbolistas mejor colocados en su órbita.

Un acicate para la afición

Además de la necesidad deportiva de reforzar el ataque, la posibilidad de aliñar la plantilla con un delantero capaz de despertar la ilusión de la grada tampoco es algo que el club haya dejado de lado.Pese a las palabras de Quico y su negativa a «vender humo», lo cierto es que el mal inicio liguero podría verse suavizado a cambio de la llegada de un delantero el último día y la continuidad de una pieza tan importante en el equipo como es la de Pape Diop.