Hacía falta alguien que encendiera la luz y ése no fue otro que Rubén. En su primera titularidad y precisamente teniendo delante a Caparrós, que nunca lo entendió, el setabense se cargó al Levante a la espalda para ganar puntos y credibilidad en Granada con una victoria mortal de necesidad para alejar fantasmas. Después de cuatro partidos y medio de sequía, tuvo que ser él quien marcara. Sin tiempo para que el Granada se recolocara tras el descanso, lo hizo con un golazo al estilo de Messi, dejando rivales atrás mientras conducía el balón por un centro del campo desguarnecido tras haber quitado Caparrós a Iturra y definiendo con un disparo raso y colocado desde la frontal para batir a Roberto.

Volvió en el momento justo Rubén, que no desaprovechó la oportunidad y que estuvo a punto de ponerle el colofón a su actuación con un gol de falta. Caliente como una tragaperras tras el gol, se pidió un lanzamiento que estampó en el larguero, una más de las oportunidades que fue capaz de generar en pleno vendaval de fútbol. Y es que no fue cuestión sólo de marcar, sino de ponerle cara al ataque azulgrana.

Pese a que era a la línea defensiva y a la necesidad de juntar las líneas a lo que más vueltas se le estaba dando, lo cierto es que hasta el 0-1 donde más cojeó el Levante volvió a ser arriba. Más allá de la irrupción de Morales, principal responsable de las jugadas con una marcha de más, no había quien se erigiera en ese hombre capaz de echarse la responsabilidad goleadora a la espalda. Precisamente el canterano, gracias también al impulso de un cohete como Toño jugando por detrás, fue quien mejor acató la orden de finalizar las acciones de ataque, en las que ya había empezado a coger protagonismo Rubén dejándose llevar más hacia el centro que por la banda derecha en la que partía de inicio. Fue la conexión entre el setabense y Morales la que más alas le dio a un Levante que esta vez se sintió cómodo con el balón al pie.

Con el indiscutible sello de Caparrós, rácano en extremo y parásito de los errores ajenos, el Granada fue un rival del que no fiarse en momento alguno pese a que su primera parte fue tan floja que no le gustó ni a su propio entrenador, que movió el banquillo al descanso tras llevarse sólo una oportunidad a la boca, el gol invalidado de Córdoba. Sin embargo, el extécnico granota no fue capaz de activar ningún botón tampoco en la segunda para hincarle el diente al Levante, que sin conceder errores de bulto y con una placentera sensación de solvencia estuvo más cerca del 0-2 que de que le empataran.

Surtieron efecto las reuniones y tuvo continuidad la primera media hora del Barcelona pese a que Mendilibar se dejó esta vez de trivotes al quitar a Simao e insistir en su idea de jugar con cuatro futbolistas de ataque por delante de la línea medular. Arropados, intensos y habiendo renunciado de inicio a Víctor Pérez, Mendilibar empieza a encontrarle la tecla a un equipo que ayer jugó con diferencia el mejor partido a sus órdenes. Más allá de la victoria, de la reinserción de Rubén o de que Ivanschitz fuera el primer cambio, lo cual suena a declaración de intenciones en toda regla, lo mejor fue la imagen convincente que dejó un proyecto al que le continúa faltando un ´nueve´ pero sobre el que ya no se ciernen tan negros nubarrones como los de las tres primeras jornadas.

Pasado lo peor del calendario y con la mayoría de lesionados viendo la luz, se agradeció también el regreso de Navarro, sin ser su mejor partido, y el mayor peso específico de un Diop todavía por cogerse. Parece cuestión de agitar solamente una pizca más todos los ingredientes para volver a saborear el cóctel de siempre en Orriols.

- Ficha técnica:

0. Granada CF: Roberto; Nyom, Babin, Murillo, Foulquier; Piti (Juan Carlos, m.60), Iturra (Javi Márquez, m.46), Fran Rico, Machís; El Arabi y Jhon Córdoba (Success, m.60).

1. Levante UD: Jesús; Pedro López, Héctor Rodas, Navarro, Toño; Camarasa (Simao, m.80), Diop (Sissoko, m.92), Rubén, Morales (Ivanschitz, m.75); Casadesús y Barral.

Goles: 0-1, m.46: Rubén.

Árbitro: Álvarez Izquierdo (Catalán). Amonestó a los locales Fran Rico y Success, y a los visitantes Diop, Camarasa, David Navarro, Héctor Rodas, Rubén y Jesús.

Incidencias: Partido correspondiente a la quinta jornada de la Liga BBVA disputado en el Estadio Nuevo Los Cármenes ante 16.000 espectadores aproximadamente.