El Levante presentará este lunes en su junta ordinaria de accionistas un presupuesto para la temporada 2014-15 que ascenderá a casi 32 millones de euros y una previsión de beneficios de 8,5 millones, según fuentes del club valenciano.
El patronato de la fundación 'Levante Cent Anys', que posee más de setenta por ciento de las acciones del club, aprobó el miércoles sus cuentas anuales auditadas y comunicó su intención de voto favorable a las propuestas del actual consejo de administración del club en la junta de mañana.
Además, el club que preside Francisco Catalán se presentará a sus accionistas tras haber logrado en la temporada 2013-14, un beneficio bruto antes de impuestos de 5,2 millones, superior en cerca de 200.000 a lo inicialmente previsto.
En los ingresos contabilizados en la pasada campaña, destacan los 20,5 millones ingresados por derechos de televisión, cantidad idéntica a la alcanzada entre abonos y entradas vendidas, a las que se suman los 400.000 euros en patrocinios y los 300.000 que aproximadamente le reportó la tienda del club.
A su vez, hay una partida de 5,8 millones obtenidos por los traspasos de Vicente Iborra (4'8 millones) y Míchel Herrero (700.000) en el verano de 2013, y por la venta de Felipe Caicedo que hizo el Lokomotiv de Moscú (300.000) en 2011.
Para esta temporada, el presupuesto crecerá cerca de tres millones de euros, y pasará de los 28'6 a los 31'3.
El aumento se dedicará casi fundamentalmente a asumir la subida del coste de la primera plantilla y ya tiene en cuenta el finiquito que hubo de abonar el club al técnico José Luis Mendilibar y a sus colaboradores tras su destitución, así como la contratación de Lucas Alcaraz para sustituirle.
En el apartado de gastos, la entidad ha previsto que sus ingresos televisivos se acerquen a los 22'5 millones y ya tiene asegurados los diez millones que pagó el Real Madrid por la cláusula de rescisión de Keylor Navas este pasado verano.
La previsión de la entidad de Orriols es tener un beneficio bruto antes de impuesto de 8'5 millones, lo que le permitirá mantener el notable ritmo que lleva de amortización de su deuda.
Ésta era en 2009 de 96 millones y se quedó en 69 tras una quita a la espera de arrancar la campaña 2015-16 con una deuda que ronde los treinta millones.
