En Orriols se han hecho definitivamente a los brazos de Medjani, su particular «hijo del viento». No por su velocidad, ni porque lleve el nombre del legendario atleta estadounidense Carl Lewis, a quien su padre ha idolatrado toda la vida, sino por la bocanada de aire fresco que ha aportado al equipo. El argelino ha hecho mejor al Levante defensivamente y hasta se atreve ya a aportar en ataque: contra el Espanyol marcó el gol que había rozado seis días antes en el Villamarín. Fue de cabeza, al rematar una falta lateral,y propició la victoria más necesaria y reconfortante en meses.

El internacional argelino acumula nueve partidos consecutivos y completos como azulgrana, desde su debut hace dos meses ante el Getafe. Es intocable para Rubi, quien apenas tardó dos semanas en brindarle su primera oportunidad tras su accidentada llegada: cuando firmó, el 30 de enero, arrastraba dos meses de inactividad y la posibilidad de que la llegada de su tránsfer se demorara 20 días.

Como pareja de David Navarro o Feddal, Medjani ha aportado al eje de la zaga su jerarquía y contundencia. También una salida de balón más que aceptable; sus condiciones técnicas le han llevado a actuar en múltiples ocasiones a lo largo de su carrera como mediocentro. De hecho, durante su última experiencia con su selección, a finales de marzo, el levantinista había jugado de ‘6’.

Su rendimiento inmedito es fruto, entre otros motivos, de su capacidad de adaptación tanto a la ciudad como a la Liga BBVA, en la que debuta en esta segunda mitad de curso. Ghilas y el valencianista Feghouli fueron sus anfitriones, aunque ahora está completamente integrado en el vestuario granota. La celebración del tanto ante el Espanyol, con dedicatoria incluida a Pedro López, expone también su condición innata como líder del vestuario. A punto de cumplir 31 años, no en vano, es el capitán de la selección de Argelia.

Su ascendencia se refleja en detalles como en su cambio de posición en el dúo de centrales con Navarro. En su estreno, con David al lado, actuaba a la izquierda; después se asentó a la derecha como pareja de Feddal, zurdo; y ahora que vuelve a actuar con el de Port de Sagunt es este el que tiene que actuar a pierna cambiada.

El 2-1 del viernes reafirmó su poderío en el juego aéreo, del que también pueden dar fe Caicedo y el resto de delanteros a los que se ha medido en España. Ha ganado 15 de las 22 disputas por alto en las que ha participado, sin contar con que en la acción del empate de Rossi su presencia en el interior delante resultó igualmente determinante; en su intento por peinar el envío del italiano, impidió que la zaga del conjunto espanyolista despejase y despistó a Pau López.

Tres goles, tres camisetas

Carl acumula tres dianas en lo que va de temporada, cada una con un equipo distinto y todas ellas de cabeza. La primera fue el 2 de octubre contra el Konyaspor, en la liga turca, antes de desvincularse del Trabzonspor por impagos y entrando en plancha. La segunda, el 17 de noviembre, en su último partido antes de fichar por el Levante, con su selección frente a Tanzania a la salida de un córner.