La coraza de Rubi ante tantos contratiempos es indestructible. Por primera vez, el técnico catalogó esta jornada de final "porque la Liga ha demostrado que no vale la pena perder ese apelativo en tantos partidos" y se mostró convencido de la salvación si el viernes no se escapan los tres puntos.

¿Cómo está el vestuario?

"Los ánimos están bien. Es una semana complicada. Sabemos que es un partido que ahora sí que sería acertado decir que es una final. La Liga ha demostrado que no vale la pena perder ese apelativo en tantos partidos. Si ganamos, el equipo se va a salvar, estoy totalmente convencido. Si sacamos este partido quedará mucho camino por hacer igualmente, pero lo que puede generar esta victoria sería media permanencia".

Los rivales directos también pinchan

"Si analizamos cualquier franja de últimos partidos, los equipos de abajo ganamos poquísimo. Esta semana, ninguno de los cinco de abajo hemos conseguido hacer un gol. Por eso insisto tanto y alguna vez me enfado en que no se puede dar al equipo por descendido en ningún momento porque pasan cosas, muchas cosas y seguirán pasando hasta el final"

Una cuestión de justicia

"Será tarde pero se empezará a hacer justicia con lo que nos merecemos. Llevamos unas semanas de trabajo de mucha confianza quitando este hecho puntual. Lo normal es que ganen uno o dos de los de abajo y esa inyección de poder ganar ese partido nos daría el impulso definitivo"

Sobre el Espanyol

"Defensivamente me parece que ha mejorado muchísimo, agresivo e implicado en lo defensivo. Es difícil meterle mano al Espanyol y en el aspecto ofensivo todos tienen tres o cuatro jugadores que marcan diferencias, ellos a Caicedo, Gerard Moreno, Marco Asensio, Hernán Pérez"