Despachado Rubi, y resuelta la situación contractual de Roger y Jason, el director deportivo se ha metido de lleno en la caza del nuevo entrenador. Con el objetivo de hacer la criba final y cerrar su fichaje esta semana, se va a reunir cara a cara con los principales candidatos al puesto; empezando por Sergi Barjuán, uno de sus favoritos, con quien podría haberse visto este lunes. Después del catalán sería el turno de Luis Milla, igualmente ahora sin equipo. Tito ya ha elegido, aunque prefiere esperar a estos cara a cara para adoptar una decisión final.

El exlateral izquierdo de Barça y Atlético es amigo del benidormí, con el que además comparte filosofía futbolística. Tito contó con él para dirigir el tercer combinado de Sesiones AFE, antes de que Sergi acumulara experiencia en la categoría de plata con Recre y Almería. El discurso actual de Tito parece sacado de una comparecencia pública de Sergi, quien siempre aboga por un juego alegre a la par que adaptable a cada situación de partido y competición. Sucede prácticamente lo mismo en el caso de Milla, en el paro desde que en febrero dejara el Lugo (con el que tenía contrato hasta 2018) por desavenencias con el dueño del club,

Entre las opciones mejor valoradas se encuentran técnicos ahora mismo en activo en Segunda, donde cuentan además con una amplia experiencia, como Asier Garitano y sobre todo Pepe Bordalás. Ambos tienen un año más de contrato, con Alavés y Leganés, respectivamente, aunque se encuentran en situaciones distintas. El equipo del vasco dilucidirá en la última jornada si sube a Primera o juega la promoción; el alicantino llegará a la misma con los deberes hechos. Su Alavés se proclamó campeón el domingo, aunque la mala relación con la directiva albiazul pone en seria duda su continuidad en Vitoria. «Espero poder seguir», deslizó lacónicamente durante las celebraciones. Los dirigentes rehuyeron hacer comentario alguno al respecto.

Solo el apoyo unánime de la afición vasca podría evitar la ruptura entre ambas partes, que semanas atrás ya se rumoreó. De Pepe, que amplió su contrato automáticamente cuando llos vitorianos se aseguraron al menos la presencia en la promoción, se llegó a asegurar que tenía un precontrato firmado por el Oviedo. El equipo que hasta hace un mes lideraba deportivamente Carmelo del Pozo, ahora mano derecha de Tito en Orriols.