El Levante tiene encima de la mesa el nombre de Rodri Hernández, una de las joyas de la cantera del Villarreal. Internacional sub-19, Rodri ha disputado esta temporada 2.844 minutos con el filial amarillo en Segunda B pese a ser uno de sus futbolistas más jóvenes. Se trata de un centrocampista potente de 1,90 metros que destaca por su recorrido y buen desplazamiento de balón. Está considerado como el heredero de Bruno Soriano y tras haberse frustrado el ascenso su futuro pasa por una cesión al estilo de los Pedraza, Leo Suárez, Íñiguez, Nahuel o Adrián. En su caso, además de clubes de Segunda A como el Levante también hay varios Primeras, entre ellos el Sporting de Gijón. La buena relación con el Villarreal, que ya colaborase para la llegada de Rossi en enero, jugaría a favor de los granotas.

Además de un fijo para Paco López en el filial, Rodri ha jugado seis partidos con el primer equipo a las órdenes de Marcelino, quien lo alineó en la victoria contra el Valencia en Mestalla. De la cosecha de 1996, Rodri se formó en las categorías inferiores del Atlético de Madrid. Llegó a la Ciudad Deportiva del Villarreal con apenas 17 años y la vitola de ser una gran apuesta de futuro. Ahora, con tres más, volverá cambiar de aires para ir fogueándose.

La vía de los canteranos

Respondiendo a una de las peticiones que se le han hecho en estas últimas temporadas, el Levante parece dispuesto a aprovechar oportunidades de mercado con jugadores jóvenes del estilo de Rodri, aunque la cantera del Villarreal no es la única en el punto de mira. También lo está, y además de manera especial, la del Barcelona, de la que curiosamente estuvo cerca de llegar el pasado verano el valenciano Grimaldo. Esta vez, si se decide a ir a por algún futbolista aprovechando además de la presencia de un ex de La Masia como Tito, el club espera correr mejor suerte. Entonces, con un acuerdo para su cesión con el Barça, el jugador se echó para atrás con el Benfica portugués ya a la espera.

Que el Levante ponga su mirada en canteras como la del Villarreal, el Barcelona o el Valencia no significa que haga de menos la suya. Es más, la política de Tito y Carmelo es potenciarla y que al contrario de los últimos años vuelvan a llegar jugadores al primer equipo. Tanto el director deportivo como el secretario técnico han dejado claro que ése debe ser el objetivo por encima de los resultados. Es más, salvo excepciones, la idea es que a igualdad de condiciones los chavales de Buñol, donde Pepelu sigue siendo la joya de la corona, tengan prioridad.

Retoques en la medular

Pese a que el bloque de futbolistas, a expensas de retoques tanto con salidas como entradas está bastante perfilado con los contratos en vigor, lo cierto es que la medular es una de las posiciones más susceptibles de novedades. La no renovación de José Mari está decidida y la salida de Simao Mate acabará siendo un hecho, por lo que en este momento sólo hay tres mediocentros puros sin contar a Pepelu: Jefferson Lerma, Verza y un Camarasa cuya situación contractual invita a pensar en posibles movimientos si el club no toma cartas en el asunto.

El aterrizaje en las próximas horas de López Muñiz, que a efectos prácticos puede considerarse ya como nuevo entrenador, se perfila determinante para avanzar en la confección de la plantilla. El míster contará con voz y voto en su composición final, por lo que tiene mucho que decir respecto al aterrizaje de futbolistas jóvenes como Rodri.