99 batallas ya ha librado el ´Comandante´ con el primer equipo del Levante desde que debutara el 30 de agosto de 2014 en San Mamés. Atrás ya había defendido la elástica del mejor filial de la historia, con Roger e Iván en aquel vestuario de la temporada 2012/2013, y volvió a Orriols reforzado de la exitosa cesión en el Eibar. Morales será centenario si Muñiz le da minutos el domingo ante un Almería con nuevo entrenador. A esta nueva cita en la cuenta atrás hacia el ascenso, llega con dos suplencias seguidas, pero con un golazo, el del 0-3 en la exhibición en Pucela. «Son causalidades», reconoce el ´11´, pero es que el anterior y primer tanto también fue arrancando desde el banquillo ante el Nàstic. «Si cada vez que soy suplente voy a marcar... ¿dónde tengo que firmar?», también bromea.

Este domingo y en un Ciutat que cree en su despegue, en que volverá por sus fueros después de una temporada en la que su chispa no ha aparecido con la misma regularidad que en la máxima categoría, Morales espera escribir otra página más como exponente de un club que le abrió las puertas de par en par y a quien quiere devolver en poco tiempo al primer escalón después de un verano complicado. «Es un orgullo y una felicidad enorme, porque el Levante me lo ha dado todo y estoy muy agradecido. Jamás pensé que en tan poco tiempo iba a poder alcanzar esta cifra de partidos. Es un honor y espero que los 100 siguientes sean en Primera División», reconoce con satisfacción.

«Uno valora estar a gusto ya sea en Primera o Segunda», afirmó a SUPER el pasado 8 de agosto. Tenía claro que si salía de Orriols era únicamente por una oferta que beneficiara al Levante. Con dos campañas más de contrato y una tercera adicional por encuentros, la idea del órgano rector ha sido firme desde el principio. Para Quico Catalán y la nueva dirección deportiva de Tito y Carmelo no había dudas de su compromiso y ahora más en una temporada en la que es uno de los cuatro capitanes del líder, una condición que estrenó ante el Elche.

Por la cuenta pendiente, sobre todo de cara a la afición, que supone recuperar sí o sí el terreno perdido, el ´Comandante´ aceptó sin dudarlo y con todas las consecuencias el extra de responsabilidad. Comenzó con la confianza absoluta de Muñiz y ahora no es que la haya perdido, ni mucho menos, sino que no ha terminado de entrelazar buenas sensaciones, de ahí que, por eso de la superstición, decidió cambiar de look y combinar su frondosa y característica frondosa barba negra con un peinado rubio platino. Por aquel entonces su cuenta de goles seguía a cero, pero la fe del preparador asturiano seguía intacta.

Ahora, con Jason consolidadísimo y Montañés recuperado después de su calvario de tres meses, Morales ha perdido galones, pero su mentalidad es la misma que si los dos últimos enfrentamientos oficiales en LaLiga 1|2|3 (ante el Elche ni jugó) los hubiera completado de principio a fin. «Es igual que si fuera titular. Somos un equipo completo y el míster sabe en cada momento los jugadores que tiene que utilizar y cuándo emplearlos. Somos 22 en un nivel altísimo y cuando nos toca a cada uno, a intentar ayudar lo mejor posible. En Valladolid salí, hice gol y eso no quiere decir que el domingo vaya a ser titular. Hay que seguir trabajando duro por el equipo», desgrana.

Morales ya tiene pensada la imagen para los 68 puntos si el líder sigue sumando de tres, «pero primero hay que conseguirlos» e incluso también quiere adornar sus 100 partidos con una instantánea bajo los mismos parámetros. «Me lo paso muy bien y ojalá mantengamos la misma dinámica y pueda subir la fotito de rigor», añade.