Muñiz no quiere forzar situaciones ni tampoco tiene "la necesidad de pedir". Ni en la planificación del proyecto de Primera ni en su situación personal, con un año de contrato automático con el ascenso. Las conversaciones entre el técnico y la dirección deportiva son constantes y uno de esos temas, aunque sin sentarse en mesa y mantel, es su ampliación contractual, de momento en 'stand-by', porque tampoco existe la necesidad de acelerar nada ya que la química entre toda las partes es absoluta. "Si tiene que surgir, surgirá, no hay que forzar nada. La relación es buena, los dos queremos continuar y encima hay una ventaja: que hay un contrato firmado. Todo lo demás es forzar situaciones", insiste Muñiz.

En la celebración del ascenso, el técnico dejó abierta la puerta por primera vez a una posible mejora más allá del año que tiene automáticamente firmado, después de haber sido ratificado al 101 por cien por el propio Quico Catalán, de quien Muñiz considera que "es el primero que quiere hacer las cosas con pausa". Otro argumento para no apresurarse a la hora de reunirse con el propósito de pulir su vinculación. De nuevo insistió en que se encuentra fenomenal en Orriols. "El ambiente familiar llena a cualquier entrenador, que pueda tener opinión desde el primer día poco más puede pedir. Estoy a gusto, en un buen sitio, con un buen proyecto, en cuanto nos sentemos no va a haber problema", explicó. Mirando al futuro, el deseo del asturiano, y lo que le motivaría más todavía, es que el Levante no se conforme, que siga creciendo: "Que el club siga en la linea que está, de intentar crecer, de no conformarse. Eso lo que pretendemos todos, cuanta mas ilusión y ambición y ganas de seguir creciendo es mejor; pero el primero que quiere hacerlo todo con pausa y con tranquilidad es el presidente. Las prisas normalmente son malas y con equivocaciones".

Todavía quedan cinco jornadas, pero es inevitable que el 'run-run' de movimientos de cara a la máxima categoría condicione de ahora en adelante. Con esta realidad tendrá que lidiar el Levante, al margen de los objetivos que restan: el campeonato y los premios individuales de Roger y Raúl Fernández. Muñiz insistió en que hay un bloque de garantías para pelear en LaLiga Santander. "Sabemos las etapas y las épocas que vamos viviendo. El vestuario está al margen de lo que se pueda comentar. Tenemos que trabajar al mismo nivel y al margen de todo tipo de comentarios. Si tiene que venir alguien tiene que mejorar muchísimo lo que hay. Aquí hay un nivel de plantilla para estar en Primera sin problemas. Estoy totalmente tranquilo porque hay una buena base. No tengo la necesidad de pedir, estoy tranquilísimo, por eso no me meto en lo que sale, se dice y lo que opinan arriba, porque hasta ahora no hemos comentado nada", reconoció el técnico del líder, que apela a la misma prudencia de su día a día a la hora de confeccionar su segundo proyecto como técnico del Levante. "Quitando las cesiones hay una base importantísima, muy amplia. No por tener prisas hay que traer a lo primero que te ofrezca el mercado. El 20 de agosto va a haber jugadores interesantes y libres. No hay una necesidad de hacer cosas drásticas porque la plantilla que tenemos es buena y competitiva. Hay que buscar lo mejor para el club".