Un técnico del Dépor comprobó in situ el pasado sábado el provecho que Róber Pier está sacando a su primer año de cesión en Orriols. El club gallego desplazó expresamente a un ojeador al Ciutat para constatar la notable evolución del central en lo que va de curso, y también interesarse personalmente por las inquietudes de este de cara al futuro.

En A Coruña tienen en alta estima al jugador formado en su cantera, aunque consideran que lo mejor, a sus 22 años, es que este se ruede uno más antes de volver definitivamente allí. Y el Levante, interesado en prolongar su cesión con vistas al regreso a Primera, está decidido a sacar provecho de ese escenario.

Como ha defendido públicamente más de una vez, el central ve con buenos ojos tanto continuar de granota como regresar a sus orígenes. Levante y Depor ya han encauzado las condiciones de un segundo préstamo, aunque será en los próximos días cuando ambas partes negocien definitivamente las condiciones de esta.

Para Tito y Carmelo del Pozo, el principal caballo de batalla será la inclusión de una opción de compra en el acuerdo. Los coruñeses desestimaron esa posibilidad pasado verano, pero los granotas no ven lógico foguear dos temporadas a un jugador de las condiciones de Róber y no tener derecho futuro alguno sobre él a cambio.

La presencia del ojeador deportivista, de la que estaban puntualmente informados en el Levante, coincidió con una de las actuaciones más destacadas de Róber. Ante el Girona, volvió a ejercer con éxito de ´6´ e incluso vio puerta por primera vez. En la dirección deportiva del Deportivo, sabedores del potencial del coruñés, no ha sorprendido la naturalidad con la que el central ha sumido el salto de Tercera (donde jugaba regularmente con el Fabril) a LaLiga 12|3, ni su capacidad de adaptación al mediocentro.