El Levante no solo va a fichar este verano a futbolistas. También trabaja en la incorporación de varios exjugadores para su organigrama, en el que Tito va a introducir cambios después de un año de transición dulce. Una vez logrado el ascenso a LaLiga Santander, el director deportivo cree conveniente ampliar la infraestructura técnica granota para adecuarla a las necesidades actuales. Y en ese proyecto es donde tendrían cabida gente del perfil de Santi Carpintero, viejo conocido suyo y de Orriols.

El leonés, ahora entrenador de un equipo infantil en Gijón, se incorporaría desde Asturias a la nueva red de scoutings que Tito quiere poner en marcha de cara a la próxima temporada. En esta entrarían más técnicos vinculados profesionalmente al de Benidorm en etapas anteriores. La reformulación de la parcela deportiva no afectaría a los tres exgranota que llevan años en la misma: José Luis Sancho, Juan Luis Mora e Iñaki Aizpurua.

El director deportivo esbozó hace varios meses su propuesta, a la que ha ido dotando de contenido y nombres propios con el paso del tiempo. A falta solo de rematar la faena, esta tarea no le impedirá continuar con las labores habituales de mercado de la primera plantilla: todavía faltan casi una decena de altas y varias bajas por concretar.

Con la futura puesta en funcionamiento de una red de ojeadores, Tito confía en alcanzar un mayor y mejor control del mercado. Especialmente a nivel nacional. El Levante contaría con varias personas diseminadas por el país para realizar el trabajo de campo. Para detectar talentos al alcance de la entidad de Orriols, tanto en cantera como en categorías como Segunda B y Tercera División. Una primera selección, vía informes, que posteriormente tendría que pasar por las manos del director deportivo y los responsables de cada parcela. Ya sea Carmelo del Pozo, secretario técnico del primer equipo; José Hernández, encargado de filial y juvenil; o Sergio Gómez en el fútbol base.

Cuéllar compitió con Paco López

La apuesta de Tito por repatriar a varios de sus excompañeros en el vestuario del Levante estuvo a punto de hacerse extensiva al banquillo del filial. Entre los aspirantes a suceder a Carlos Granero se encontraba Ángel Cuéllar, al igual que otros dos exfutbolistas granotas de épocas anteriores, como era el caso de Raúl Garrido y el finalmente elegido Paco López.

Después de romper en un cadete y en la selección autonómica alevín de Galicia, el que fuera extremo internacional y exjugador también del Barcelona dio el salto al fútbol Paiosaco coruñés en la 14/15. Con este logró el ascenso a Preferente Autonómica, lo que le valió ese verano para fichar por el histórico Cerceda. Allí permanecería hasta el pasado mes de febrero, cuando la grave situación financiera del club (al borde de la desaparición) hizo mella en la plantilla y se apostó por un relevo en el banquillo.