En Orriols hace tiempo que saben de Rafael Santos Borré, por cuya disponibilidad inmediata han preguntado en los últimos días al Atlético a raíz de la grave lesión de rodilla de Roger. El nombre del colombiano surgió por primera vez hace dos años, meses antes de que los colchoneros pagasen casi siete millones de euros por él. Cuando todavía pertenecía a Deportivo Cali, y tenía apenas 19 añitos, al Levante se le presentó la posibilidad de concretar su cesión con una opción de compra asequible. Finalmente no fue adelante la operación.

Tampoco se presenta fácil su incorporación de cara a la 17/18. El conjunto rojiblanco no valora un préstamo, a diferencia de lo que ha sucedido con el luso Diego Jota, que se marcha al Wolves de Nuno. Apuesta por un traspaso, y por recuperar con este buena parte de lo invertido en su día por el futbolista. Aunque sin desprenderse por completo de sus derechos, consciente de su potencial y de que el principal problema que tiene el cafetero es la feroz competencia que hay en la delantera: Griezmann, Torres, Gameiro, Correa, Vietto también están en nómina, más la pretendida llegada de Diego Costa en enero.

La adquisición de la mitad del pase de Santos Borré podría rondar los tres millones. Una cantidad que a los granotas se le puede acabar escapando por el fair play financiero y las obligaciones de pago que se arrastran del concurso de acreedores. Estas últimas impiden contar con los ingresos íntegros de las ventas de Deyverson y Camarasa para reforzar el ataque y contrarrestar los efectos perniciosos de la baja de larga duración del ‘pistolero’.

El Levante no es el primero ni el único equipo español que ha preguntado a lo largo del verano por el internacional cafetero. Entre sus pretendientes se encuentran el Getafe, el Alavés o un buen número de clubes de LaLiga Santander. A favor del interés granota pueden jugar los estudios de su novia, que esta ha cursado durante el último curso en València.

De terminar recalando en Orriols se repetirían prácticamente las circunstancias que llevaron a Santos Borré al Villarreal hace un año. En 2016, los amarillos apostaron por él de urgencia después de que Soldado se rompiera durante la pretemporada. Sin rodaje alguno en el fútbol europeo, y apenas unos entrenamientos a las órdenes de Escribá, el colombiano jugaría como titular los dos encuentros de la previa de la Liga de Campeones frente al Mónaco; en el ida asistiría a Pato en el gol del submarino.

Con el rodaje en España hecho

Rafael, destacado por su movilidad, y letal en el juego a la contra (condiciones que le asemejan a Roger), llegaría al Levante una vez superado su duro proceso de adaptación al fútbol continental. En la 16/17 marcó su primer gol en el estreno en la Europa League, pero después le costó volver a ver portería. Lo hizo hasta en tres ocasiones entre finales de febrero y principios de marzo, pero ya no pudo recuperar el sitio ante Soldado y Bakambu. En la anterior campaña, pese a ser propiedad del Atlético, se había quedado en el Deportivo Cali a préstamo.