Dos meses y medio después de salir llorando del terreno de juego en un encuentro amistosos de pretemporada ante el Almería, Roger Martí continúa machacándose a diario para volver cuanto antes a los terrenos de juego. En esa lucha, el futbolista se ha tatuado una frase motivacional que le anima todavía más a trabajar duro para volver a disfrutar sobre el césped del Ciutat de Valencia, algo que no podrá hacer hasta 2018. Mientras, su gran obsesión es ir quemando etapas para llegar cuando antes a cumplir ese objetivo, una meta que tiene cada día más cerca y que marcha por buen camino, como así le aseguró el Doctor Cugat esta misma semana.

"Buenas cosas vienen para aquellos que creen, cosas mejores vienen para aquellos que son pacientes, pero las mejores cosas vienen para aquellos que no se rinden". Esa es la frase que se ha tatuado Roger en el muslo durante este periodo de recuperación, un proceso al que ya tuvo que hacer frente cuando estuvo cedido en el Valladolid.