Definitivamente, el Levante UD no está teniendo suerte con las lesiones esta temporada. Los percances físicos, y casi siempre de gravedad, se acumulan en torno a la plantilla en este primer tercio de curso. El último en detonar las alarmas ha sido Alex Alegría, que se ha tenido que retirar este viernes del entrenamiento en Buñol cojeando y con evidentes síntomas de dolor.

Los temores iniciales se cumplieron ya que las pruebas médicas realizadas al delantero de Plasencia han revelado que el atacante sufre una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha tras una mala caída en un salto en los minutos finales de la sesión de trabajo desarrollada en la jornada de hoy en las instalaciones de la Ciudad Deportiva de Buñol.

Roger e Iván López, quien también se lesionó en Buñol, se encuentran en pleno proceso de recuperación de sendas roturas de ligamento cruzado de la rodilla. También Nano está en el dique seco por un problema en la misma articulación, aunque de menor gravedad. En cuanto a los problemas musculares, que igualmente se han acumulado en el arranque de LaLiga Santander, han quedado por ahora en el pasado.

Un nuevo problema en ataque

La baja de Alegría dejará a Muñiz nuevamente con solo dos delanteros disponibles: Boateng y Enes Ünal. El turco se acaba de incorporar precisamente a la plantilla para aumentar las opciones en ataque y aprovechando la larga duración de la convalecencia de Iván.