El Levante presentó a su primer y de momento único refuerzo del mercado de enero, un Coke Andújar que lleva días a las órdenes de Muñiz y que se encuentra a su disposición para debutar mañana ante el Espanyol si hace falta.

El excapitán del Sevilla, cedido por el Schalke 04, es la apuesta para reforzar una demarcación en la que sin el lesionado Iván López y con Shaq Moore en mantillas, la dirección deportiva ha optado por hacer este esfuerzo. Su fichaje pudo ser una realidad el pasado verano y precisamente gracias a aquel entendimiento las cosas han sido más fáciles. Para que llegara antes de la apertura del plazo, su relación con Carmelo del Pozo desde los tiempos en el Rayo ha sido clave.

Ante la presencia de Miguel Ángel Ruiz, que ejerció de maestro de ceremonias en ausencia de Quico Catalán, y del director deportivo, Coke señaló que «el Levante cumple mis expectativas» y que a sus 30 años «es un buen lugar para crecer». «Vengo aquí a ayudar al equipo. Tengo ganas, experiencia y ganas de aportar mucho. Con trabajo y pisando el acelerador fuerte voy a tener oportunidades para ayudar. El Levante me transmite confianza y seguridad y ahora me tengo que ganar la continuidad con trabajo».

El lateral reconoció que necesitaba darle un giro a su carrera por la falta de minutos que arrastraba en la Bundesliga, donde una desgraciada lesión de ligamento cruzado frenó su progresión la pasada temporada: «En lo personal, mi experiencia en Alemania ha sido buena, aunque en lo deportivo no encontraba los minutos que necesitaba, y un futbolista necesita jugar para sentirse realizado... Allí, tanto el técnico como la dirección deportiva lo han entendido perfectamente».

Respecto a la posibilidad de terminar alargando un vínculo que de momento es sólo hasta fin de curso, el vallecano no se moja: «¿Seguir el año que viene? Es algo que ahora mismo es imposible saber. Ojalá, aunque es muy difícil sentirse identificado con un club desde el primer día, el recibimiento de todos ha sido inmejorable». Lo cierto es que el club se planteó en su día la alternativa de ficharlo en propiedad. Sin embargo, entre su ficha y la tasación del Schalke 04 la operación se disparaba.

Eso sí, lo que Coke tiene muy claro es que en su decisión de recalar en el Levante ha sido clave un santo y seña granota: «He hablado mucho con Iborra, me dijo que iba a ser un sitio perfecto y que me iba a adaptar perfectamente. Iborra es uno de los motivos por los que estoy aquí. Es un gran embajador del Levante por todo el mundo».

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