Tras pasar una última oferta de tres millones de euros, cantidad en la que en su momento el Sivasspor se comprometió a traspasarlo, el Levante descartó hace días el fichaje de Arouna Koné. El club, y en especial Quico Catalán, se sintió engañado por el delantero marfileño, que a la hora de la verdad no cumplió con su palabra de apretar al club turco para forzar su traspaso y cumplir así su deseo de regresar a Valencia. La actitud de Arouna, con el que las negociaciones se alargaron prácticamente un mes, tenía con la mosca detrás de la oreja a los granotas, quienes en vistas de los acontecimientos llegaron a temerse que estuviese haciendo un doble juego para forzar una renovación.

Esas sospechas se han visto confirmadas este domingo conla informción publicada por Gazete Sivasspor, según la cual Koné ha llegado a un acuerdo con el Sivasspor para renovar su contrato hasta 2020. Una traición en toda regla al Levante UD, que había puesto toda la carne en el asador para repescarlo. Arouna tenía una opción para renovar automáticamente una temporada más en función por partidos, pero con este acuerdo que aún no es oficial verá mejorada notablemente su situación contractual con una temporada fija más adicional. La ofensiva final fue en balde.