Muñiz no fue el único al que la mala racha de resultados se llevó por delante semanas atrás. La crisis deportiva granota, que alcanzó las 15 jornadas consecutivas sin ganar, también mandó al traste las negociaciones abiertas para el fichaje de Takashi Inui. Realizados con éxito los primeros contactos, la caída clasificatoria en picado del equipo a principios de 2018 llevó al club a ralentizar sus movimientos para evitar hipotecarse en un posible descenso, y, al mismo tiempo, aconsejó al nipón a mirar hacia otro lado. Resultado: el extremo, quien acaba contrato con el Eibar, ha hecho igualmente oídos sordos a la propuestas de renovación y se marchará finalmente a coste cero al Betis el próximo 1 de julio.

Era precisamente el técnico asturiano uno de los grandes valedores de la incorporación del japonés. La notable actuación cuajada por este último en la visita de los de Orriols a Ipurua, a finales de octubre, había disipado cualquier duda respecto a la idoneidad del futbolista.

A sus 29 años, y después de tres en el conjunto armero, está completamente adaptado a LaLiga Santander (que no al idioma, que continúa sin dominar) y a las exigencias de un conjunto de la zona media-baja: además de su despliegue técnico, no escatima esfuerzos ni derroche físico a las órdenes de Mendilibar.

La misma fórmula que con Luna

Los granotas aprovecharon que quedaba libre el 30 de junio para entablar formalmente contactos con él meses atrás. De esa misma manera ya habían conseguido pescar a Antonio Luna para este curso en el Eibar, que confiaba en que no se repitiese la experiencia del lateral y poder retener al extremo. Este, sin embargo, se marchará a coste cero con otra pieza codiciada de la plantilla armera: Dani García. El medio acabará en el Athletic junto a Capa, por quien los leones pagaron en 2017 tres millones de euros para asegurarse sus servicios con un año de anticipo.

El mercado de jugadores que acaban contrato todavía ofrece objetivos interesantes, así como otros (como el citado Dani García o Guaita) que tienen cerrado su cambio de aires. También los hay que han renovado su contrato en los últimos meses de vigencia del mismo.