Rubén Rochina fue la gran novedad en la sesión de entrenamiento del Levante celebrada en la Ciudad Deportiva de Buñol. El centrocampista valenciano cayó lesionado el pasado 21 de marzo con una rotura en el aductor derecho tras un lance fortuito con su compañero Cabaco.

El parte médico señaló que el jugador iba a estar de baja cerca de tres semanas y se están cumpliendo las previsiones. Tras mucho trabajo con los fisioterapeutas y en el gimnasio, el futbolista pudo saltar al césped donde completó la primera parte del entrenamiento.

Descartado para el duelo del domingo ante Las Palmas, la idea es que si evoluciona bien pudiera entrar para el compromiso ante el Atlético del próximo 15 de abril.

Por otro lado, Paco López pudo contar con Morales y Lerma. Ambos jugadores trabajaron al margen de sus compañeros el pasado martes por precaución aunque hoy ya lo hicieron con total normalidad con lo que no tendrán ningún problema para llegar al duelo ante el cuadro insular.

El técnico de Silla contará con un total de nueve bajas para el trascendental encuentro ante Las Palmas con lo que únicamente dispone de 19 jugadores aptos. Si no hay ningún contratiempo de aquí a la fecha del partido tan solo se vería obligado a hacer un descarte técnico.