El fútbol, como la vida, son estados de ánimo. El Levante, siguiendo esa premisa, está en el mejor momento del año. Justo cuando la temporada apura sus últimas páginas y cuando el levantinismo espera ansioso a cada encuentro de su equipo. Los jugadores han pasado de cierta impotencia por la falta de buenos resultados a no quitarse la sonrisa de la cara. Como Boateng y Enis Bardhi, grandes protagonistas del 5-4 al Barcelona. Ellos recibieron de primera mano el calor de los seguidores, quienes realizaron grandes colas en la tienda granota del Ciutat de València esperando a la firma de sus ídolos.

La tienda del feudo del Levante se ha llenado desde primera hora de la tarde para esperar a los dos goleadores que pasarán a la historia por su triplete y doblete ante el Barcelona. Muchos de los presentes de hecho recordaban a los futbolistas que ha sido "uno de los mejores días de su vida". Otros, en una mezcla de agradecimiento por disfrutar junto a ellos, pero de reproche por ver cómo tras el 5-1 el partido se apretó, les pedían que no les hicieran sufrir tanto la próxima vez.

Mientras, uno de los protagonistas, Enis Bardhi, comentaba que ha sido una de las semanas más felices del año y que están muy contentos por poder hacer felices a los aficionados del conjunto granota. "El partido contra el Barcelona fue una gran noche para todos nosotros. Era el último partido en casa, sabíamos que podíamos y al final ganar al Barça, que es un gran equipo, fue espectacular. Esta afición siempre está lista para nosotros y por eso siempre intentamos devolverles ese cariño sobre el campo, para que estén felices". Ese cariño del que habla Bardhi se ha podido ver en una tienda en la que también, Carolina Marín y Natalia Ramos, jugadoras del femenino, han participado en esa firma de autógrafos. Ellas, que también han cumplido con el objetivo de la clasificación a la Copa de la Reina, afrontan una semana de nervios antes de la eliminatoria ante el subcampeón, precisamente el Barça. El sentir del vestuario es ahora pensar que si los pupilos de Paco López pudieron hacerlo, ellas también deben creer en el milagro.