El Atlético Levante ha retornado a la Segunda División B apenas una temporada después tras superar a la UD Ibiza en la tanda de penaltis por 4-3. Un tanto de Mongil había igualado la eliminatoria.
El partido comenzó con un Atlético Levante algo nervioso por la obligación de tener que marcar. La UD Ibiza contuvo bien al equipo granota y se dedicó a esperar sus opciones. La primera gran ocasión del encuentro fue para el cuadro visitante tras un peligroso centro al segundo palo que no acertó a rematar Abel por poco.
El filial comenzó poco a poco a meterse en el encuentro. Una internada de Joan por la banda derecha propició la primera llegada con peligro de los de Olaizola después de que Álex tuviera que intervenir en el centro del interior levantinista. El Atlético Levante lo siguió intentanto y Aly tuvo el primer gol en sus botas tras un dispara raso que se fue pegado al poste izquierdo de la meta ibicenca.
El choque continuó con dominio local. Una galopada desde campo propio de El Hacen concluyó con un excelente pase a Álex Cortell que en el uno contra uno desperdició la opción de abrir la lata tras una buena intervención de Álex. El asedio siguió con dos ocasiones claras para Manu Viana en la que la mala puntería y el acierto de Álex impidieron el gol. Juan Delgado en la acción subsiguiente remató dentro del área pequeña y el pie milagroso del arquero visitante volvió a evitar de nuevo el 1-0.
La UD Ibiza tomó aire a través de las acciones a balón parado. Un nuevo saque de esquina puso en apuros a la zaga valenciana tras un cabezazo de Liñán que se fue alto por poco. Después de otro córner los visitantes pidieron penalti por agarrón dentro del área a Cirio.
El encuentro se encaminó al descanso con el marcador inicial y con la sensación de que los de Olaizola habían merecido algo más.
Tras la reanudación el Atlético Levante siguió con la misma dinámica. Dos acciones por el perfil zurdo de Manu Viana obligaron a la UD Ibiza a ceder dos saques de esquina que fueron botados sin consecuencias. Pese a este arranque el conjunto balear tuvo una buena oportunidad en un tiro lejano de Edu Oriol que obligó a Cárdenas a enviar a córner.
El encuentro cambió a partir del minuto 57 con una falta al borde del área de Verdú que le costó la segunda tarjeta amarilla. Posteriormente el colegiado también expulsó al levantinista Shaq por una presunta agresión a un jugador visitante. La falta botada por Mongil se coló por el centro de la meta de Álex y puso el 1-0 en el marcador, igualando la eliminatoria.
El árbitro se erigió en protagonista tras anular el segundo tanto a los granotas con una falta inexistente de Mongil dentro del área. El cerco a la meta de la UD Ibiza continuó. Joan tuvo una ocasión inmejorable con un balón suelto dentro del área que Abel sacó milagrosamente para los suyos y tras una gran asistencia de Juan Delgado.
Con el paso de los minutos, el juego fue decayendo debido al cansancio de los jugadores. Ambos equipos buscaron el gol que evitara la prórroga con acciones individuales que resultaron infructuosas. El encuentro se alargó hasta los 98 minutos con susto final para los de Olaizola con una pelota que remató alta y a puerta vacía Cirio.
Los dos equipos se vieron abocados a una prórroga en donde las piernas tenían mucho que decir. Olaizola cambió su tridente ofensivo con la entrada en el campo de Andreu y Álex Gil por Manu Viana y Álex Cortell. Los balones largos fueron el arma expuesta por el filial con el objetivo de optimizar al máximo las escasas fuerzas que aún les quedaban.
La UD Ibiza optó por ataques más elaborados con un incisivo Cirio como principal amenaza aunque con falta de acierto en el último remate. Sin apenas ocurrir nada el partido se fue a la segunda parte de la prórroga.
Una internada por la banda derecha de Álex Gil sirvió un balón de oro a Joan que por centímetros no pudo conectar con el esférico en una oportunidad inmejorable. El Atlético Levante cargó sus ataques por la banda diestra con Alberto, Álex Gil y Joan, incombustible en el choque, pero de nuevo la falta de precisión pasó factura.
Los penaltis iban a decidir el ascenso a la Segunda División B. La UD Ibiza tuvo dos penas máximas para subir tras laos fallos de Mongil y Álex Gil, pero los penaltis le debían una al filial. El conjunto ibicenco falló tres penas máximas seguidas con dos grandes paradas de mérito de Cárdenas. Fran Manzanara tuvo el honor de lanzar el decisivo y lo consiguió. El Atlético Levante vuelve a su sitio.
