Los dramas mejor dejárselos a José Zorrilla, en cuyo estadio intentará levantar cabeza el Levante después de «un día de luto». Porque como dijo Paco López, no van tan mal las cosas como para tener «urgencias ni necesidades» a estas alturas. Son el 2-6 del Sevilla y cuatro jornadas sin ganar con las que carga su equipo, hasta arrastrarlo hasta las inmediaciones de las posiciones de descenso, pero también con «las mismas ideas e ilusiones» que le hicieron campar a sus anchas en el último tercio de la pasada LaLiga y en el Villamarín, en el estreno de esta.

«Tenemos un vestuario sólido y nuestro análisis lo hacemos desde el juego y desde el marcador. Si nos fijamos solo en lo segundo hay mucho más trabajo», incidió el técnico, decidido a dejar claro que habrá rotaciones que no cambios (entiéndase el matiz), y a cerrar filas en torno a los suyos. Oier, el primero. El vasco, cuestionado por sus errores del domingo y su airada reacción ante las críticas, con la posterior disculpa, mantendrá su sitio en el once del de Silla: «Se puede equivocar como cualquier otro. Tenemos la misma confianza en él que cuando fue preseleccionado por España».

A raíz de la citada gestión de esfuerzos, con el choque frente al Alavés a menos de tres días vista, aparecerán en escena varios actores nuevos. El descarte de Róber asegura una variación en la zaga, aunque hasta tres podrían darse de inicio. Pedro López, sin recambio natural en el lateral derecho, se presenta como el más intocable de todos. Chema y Toño tienen todos los números para regresar al once.

La visita a Valladolid se presenta como una oportunidad inmejorable para comprobar de qué es capaz Vukcevic. Entre que es el fichaje más caro, que los pucelanos son un «rival incómodo», y que la media ha perdido equilibrio sin Lerma, hay muchas esperanzas depositadas en la posible titularidad del montenegrino. Su presencia en la alineación relegaría al banquillo a Prcic, pero no supondría renuncia alguna al sello ofensivo de Paco López: «Existen dos formas de afrontar un partido; esperar el error o provocar el error. Nosotros apostamos por la segunda», reforzó el entrenador.

Las rotaciones no deben afectar a Morales y Roger las principales fuentes de inspiración granotas en las cinco jornadas previas. Entre ambos se reparten siete de los ocho goles logrados, a los que hay que sumar el de Simon en el descuento ante el Sevilla. Con el nigeriano cogiendo todavía impulso y Rochina en casa, Jason está llamado a aportar aire fresco en una de las bandas. La otra sería para el Comandante, salvo que Paco López le vuelva a adoptar como segundo punta.

Una dosis de descanso no le vendrá mal a Bardhi, quien ni con su selección ha tenido un respiro. Boateng, más que Mayoral, es quien se presenta firmemente como compañero de viaje del 'Pistolero'. Dwamena, víctima de la competencia, volvió a quedar descartado.