Algo falla en la delantera Borja Mayoral-Roger. Ya sea por sus similares perfiles (son los dos arietes que tiene Paco López en plantilla), por falta de química o porque aún no han encontrado la forma para interactuar, el equipo y ellos mismos sufren cuando ambos coinciden en el once. En las cuatro veces que lo han hecho, el Levante solo ha sido capaz de arañar un punto. El de El Alcoraz, en los últimos minutos y merced a la aparición en la ecuación de un tercer punta: Boateng.

Como 'Manolito', el único tanto que ha anotado el punta cedido por el Real Madrid en lo que va de LaLiga Santander ha sido saliendo desde el banquillo. En Ipurua, en el tiempo de descuento, el '2' marcaba el gol del empate y, sobre todo, parecía disipar las dudas respecto a su rendimiento. En Vallecas, sin embargo, Borja rescató su versión lacónica. Se le volvieron a hacer cuesta arriba la verticalidad, la exigencia y la distancia de la portería con la que deben de convivir los atacantes granotas. Sus buenos movimientos lejos del área se perdieron con el paso de los minutos, al igual que el recuerdo del zurdazo que había estrellado dentro del área en el cuerpo de un zaguero.

El de Vallecas tampoco fue el mejor partido de Roger, aunque principalmente por una cuestión de puntería. El Pistolero, con Morales menos presente en ataque que de costumbre, se convirtió en el principal foco de peligro granota. Cedió el balón que golpeó desde la frontal Rochina -en el primer tiempo- y puso a prueba a Dimitrievski con varios remates. El más claro, apenas a los 10 minutos, pudo cambiar el devenir del encuentro: un mano a mano que estampó contra el meta local.

Los tres precedentes

Paco López echó mano de los dos '9' puros de inicio ya ante el Sevilla. Aquel día, el Pistolero vio puerta y la primera media hora de la sociedad invitó al optimismo; el resto de ese encuentro y el siguiente, en Valladolid, llevarían al técnico a desterrar esa posibilidad durante dos meses. Hasta Huesca, con el Comandante sancionado, no volverían a coincidir ambos en la alineación titular. Allí marcaría de nuevo el valenciano.

Roger-Morales, pareja más productiva

El paso de las jornadas ha encumbrado a la pareja que forman Roger y Morales como la más utilizada y sobre todo productiva. Por goles y por resultados. Su sociedad ha reportado nueve de los 27 tantos del equipo, así como 14 sobre 21 puntos posibles. Con ellos había empezado el curso el de Silla, y también encadenaron los azulgranas la mejor racha de resultados en lo que va de temporada.

El único futbolista ofensivo que no ha entrado en la rotación en LaLiga Santander es Dwamena, curiosamente el primero al que recurrió el técnico en Vallecas para intentar remontar. El punta más caro no acaba de hacerse con un sitio, a diferencia de lo que sucede con Boateng. 'Manolito', como el Pistolero, ha mezclado ya con el resto de puntas excepto su compatriota. Mayoral no ha formado dúo en lo que va de temporada con Morales, precisamente uno de los encargados de convencerle para que aceptara su cesión al Levante.