¿Dónde está Doukouré? Al estilo Fahad, esa fue la pregunta en Orriols el día del cierre de mercado de invierno. Y es que el marfileño, aun así dentro de la convocatoria de 22 jugadores para el partido de este sábado contra el Getafe, se ausentó del entrenamiento del jueves sin justificación alguna. Oficialmente estaba enfermo, aunque el hecho de que durante buena parte del día no diera señales precipitó que, tras contactar por fin con él telefónicamente, el médico se personase por la tarde en su domicilio para comprobar cuál era su estado.

Aunque este viernes se ha ejercitado con normalidad, lo cierto es que la noche anterior Doukouré apenas durmió. En ese momento, curiosamente, estaba siendo el protagonista de una situación confusa con los vaivenes de última hora del mercado. Y es que los últimos días han sido bastante estresantes para él después de que el club pasara en 48 horas de abrirle la puerta a cerrársela. Un cambio motivado por el frustrado fichaje de Lukic.

Ante la negativa del Torino, el Levante decidió finalmente retener al marfileño para no debilitarse quedándose sólo con cuatro centrocampistas más Manzanara tras la cesión de Prcic. Y de paso, además, para no reforzar a rivales directos como Getafe o Rayo. Doukouré tenía otras ofertas, entre ellas una del Udinese, y salta a la vista que el cambio de postura oficial respecto a su continuidad le ha disgustado.