A quien entonces creyera entrar en un agujero de gusano, el espacio y el tiempo le ha acabado poniendo delante de la cruda realidad: tres meses más tarde, con la oferta de renovación de octubre de por medio, ha quedado meridianamente claro que JasonEl martes saltó la noticia y, con esta, por los aires cualquier posibilidad de que el 'Yo aquí' del gallego el 30 de septiembre tenga recorrido. Aquel gesto quedará catalogado para la historia granota de rareza o 'epic fail'. En su primer y por ahora único gol del curso, el '23' rompía a señalarse el pecho y hacía un guiño (o al menos, lo parecía) con vistas a su hipotética continuidad.

El partido de la séptima jornada, a reeditar el próximo lunes en Mendizorroza, fue único en muchos sentidos. Para empezar, porque dejó el cambio de Paco López del 4-4-2 al 3-5-2, desde el cual Jason se ha adueñado del carril derecho. El gallego recuperó la titularidad después de que el peor mini-tramo de la temporada, a nivel colectivo e individual, respectivamente, hubiera deparado dos derrotas y 16 minutos jugados ante el Sevilla y en Valladolid. Y lo celebró por todo lo alto: entrando por sorpresa desde segunda línea para cabecear abruptamente a la red el centro desde la izquierda que supondría el 1-1. Después llegaría el tanto del triunfo, por mediación de Toño; otro jugador que estaba a nueve meses de quedar libre y que salía reforzado por el cambio de sistema.

No ha vuelto a ver portería el gallego, posiblemente lastrado por su reubicación. Partiendo unos metros más atrás, y con mucho campo que abarcar, donde se ha mantenido en números es en el apartado de asistencias: cuatro, el que más lleva de la plantilla en LaLiga Santander Cierto es que el todavía '23' granota no rompió a marcar la campaña pasada, la primera que completó en la máxima categoría. Hizo un tanto, en Las Palmas, que como los otros once que por ahora lleva en el primer equipo sirvió para puntuar. En aquel caso, para ganar.

Tanto él como Paco López -quienes se vieron ayer, como desveló Deportes Cope Valencia- están por la labor de que prevalezcan los criterios deportivos al malestar generado en la afición por su acuerdo con el Valencia. Por eso, Jason está todavía en disposición de alcanzar el centenar de partidos con el Levante. Con el del sábado, ante el Getafe, suma 95. Del primero han pasado casi seis años -aquellos tres minutos que le brindase Caparrós ante el Sevilla con 19 años-; del primer gol de su cuenta, dos y medio. Con su tanto en Soria, en la primera jornada, empezaría con éxito la operación regreso en LaLiga 1|2|3.

A dos tarjetas de sanción

Lo que ya conquistó Jason contra los azulones fue el medio centenar de presencias en LaLiga Santander. Las 20 últimas son de esta misma temporada, en la que solo se ha quedado sin participar en el citado duelo ante el Sevilla y, por acumulación de tarjetas, en el cierre de 2018 en Vallecas. Desde su ausencia en la derrota frente al Rayo ha visto tres tarjetas más, por lo que se encuentra a dos de tener que cumplir nuevamente sanción.

El Alavés quiso ficharle en 2017

Jason vestirá de blanquinegro a coste cero, aunque podría haberlo hecho de blanquiazul y vía traspaso hace dos años. El Alavés presentó una oferta por sus servicios el verano del ascenso, el mismo en el que lo hizo el Wolfsburgo y en el que el club entabló los primeros contactos con los representantes del gallego para intentar cerrar su ampliación de contrato. Gestiones, todas ellas, que no cuajaron.

Los granotas rechazaron entonces la posible marcha del gallego, lo que les obligó por contrato a duplicar su paupérrimo salario -al borde del mínimo salarial establecido por LaLiga-. Los babazorros, rivales el lunes, apostaban por él para reforzar el extremo después de su sobresaliente actuación en LaLiga 1|2|3.