Buenos días Aitor. Terminado uno de los últimos entrenamientos de la semana antes del partido contra el Madrid, ¿se nota algo diferente?

—Está claro que todo el mundo quiere jugar este tipo de partidos. Contra uno de los mejores equipos del mundo siempre es atractivo y tenemos muchísimas ganas de como en la primera vuelta darles un susto.

En ese partido del Bernabéu lo vio desde el banquillo. Ahora parece tener el rol de titular. ¿Cómo lo está viviendo?

—Uno siempre entrena para jugar. Ahora ha llegado mi oportunidad. Ahora toca no soltar esa titularidad y la verdad que estoy contento, esperemos que todo siga así.

Fue titular por primera vez ante el Getafe y Oier hizo un post en las redes sociales.

—Sí que es verdad que tenemos una grandísima relación. Todos queremos jugar y Paco es el que tiene que decidir quién de los tres en este caso tiene que jugar. Somos compañeros de habitación, para mí Oier es uno de los apoyos más grandes que tengo en el vestuario y eso no ha cambiado nada.

Habla de que Paco es el que decide. ¿Qué importancia tiene el técnico en su carrera?

—Paco en mi carrera... en Segunda B cuando coincidí con él creo quizá no estaban siendo mis mejores años y con él cogí de nuevo esa ilusión. Él ha sido también el que me ha dado ese salto de jugar en la elite, en Primera División. Siempre estaré agradecido a él y ahora me toca devolver la confianza que ha puesto en mí.

¿Ha costado mucho ese debut en Primera?

—Sí sí, porque con el Athletic entraba en convocatorias en Primera, nunca he podido debutar. Entrenaba con 19 y 20 años con ellos habitualmente y mi debut ha llegado con 27. La espera se ha hecho larga, esperemos que sea para quedarnos y alargarlo todo lo que se pueda.

Comenta que se ha hecho larga. ¿Dudó en algún momento?

—Sí. Con 20 lo ves tan cerca que van pasando los años y no te llega la oportunidad y lo piensas. Pero nunca me he frustrado. He seguido trabajando, he creído en mí y creo que ese es uno de los motivos por los que he llegado a Primera.

Este año además le llega la oportunidad en un momento malo del equipo. Si hace tres meses se hablaba de Europa ahora la zona baja se acercaba. ¿Notó esa presión en su debut?

—No. No estábamos consiguiendo puntos pero estábamos a una cierta distancia del descenso. El equipo estaba bien, quizá no teníamos esa suerte cara a gol ni de poder conseguir los tres puntos, pero yo vi al equipo muy bien. No he visto peligrar al equipo por esos puestos de descenso. Sí que es verdad que había que ganar ya y la semana pasada fue una victoria importantísima y además ganando el golaveraje al Celta de Vigo.

Esa victoria en Balaídos llega con defensa de tres, desde la portería no influye tanto el sistema. ¿O sí?

—Influye. Al final con esa defensa de tres centrales yo creo que estoy más arropado y más cómodo y para mí es mejor esa defensa de cinco. El míster es el que decide y en realidad a principio de año hicimos un inicio de año muy bueno con defensa de cuatro, por lo cual este equipo está capacitado para jugar como el míster decide.

Y sobre la filosofía. La de Paco es juego valiente y ofensivo. Eso provoca que encajéis también goles. ¿A un portero no le gusta mucho eso de ver cómo le marcan tanto no?

—Está claro que al final los goles se los meten a todo el equipo, pero nosotros —los porteros— nos sentimos quizá un poco peor cuando encajamos muchos goles. Lo más importante es la alegría que tiene el equipo. Yo no cambiaría el carácter ofensivo del equipo por ser más defensivo. Este equipo está hecho para atacar y seguir atacando.

Ese carácter es el que también lleva a ganar al Madrid en el Bernabéu. Ahora que es mejor, que venga el Madrid enfadado tras perder o en racha positiva.

—No sé qué es mejor. Vendrán un poco enfadados y será un partido complicado. Da igual cómo vengan en realidad. Tendremos que hacer muchísimas cosas bien si queremos sacar algo positivo.

Este partido llega en un buen momento. No ganar en Balaídos habría generado otro ambiente. ¿Había miedo en la plantilla en el viaje a Vigo?

—Nosotros siempre somos positivos. Sí que es verdad que era un partido muy importante. Meterle tres puntos más a un rival y el golaveraje es importante no vamos a negarlo. Pero si no hubiéramos ganado este equipo todavía seguía vivo. Quedan muchísimas jornadas. Tenemos que seguir sumando hasta los 42 puntos y es lo que toca.

Queda mucho y tiene razón. ¿Cree que el ambiente fue más negativo por todo lo que ha ido pasando en las últimas semanas? ¿Cómo ha vivido el caso Toño?

—Cuando no tienes a los compañeros que quieres tener en el vestuario pasa algo raro. Nosotros al final estamos expuestos a eso. Tenemos que centrarnos en lo nuestro. En el día a día y ser mejores y es lo que tratamos de hacer.

Ese trabajo de día a día les permite ahora estar décimosegundos. ¿Dónde pone el techo del equipo?

—El objetivo es la permanencia y no nos podemos salir de ese discurso. 42 puntos y luego ya se verá.

¿Te ves jugando con el Levante en Europa?

—Ojalá. Este año está todo muy apretado pero como bien te digo tenemos que ir... la frase es muy típica, pero hay que ir partido a partido y ya está.

A nivel contractual, su cláusula es de 20 millones pero podría salir por menos en algunos casos. En un buen momento como el que está, ¿piensa en ofertas de otros equipos?

—Yo solo pienso en lograr puntos. Los temas de cláusulas el club verá. Yo estoy muy centrado en lo que tengo que estar. Quiero quedarme aquí, estoy muy cómodo y el Levante ha sido el que me ha dado la oportunidad de estar en Primera y por ello estoy agradecido.

También agradece a la afición el apoyo supongo. En Copa en sus actuaciones le ovacionaron.

—Se agradece. Salieron partidos buenos, el del Lugo y el del Barça y ese es el fruto del entrenamiento de todos los días.

¿Se hizo largo el día de la vuelta contra el Barcelona por el tema alineación indebida?

—No, un día normal. Sabíamos que el partido se iba a jugar y nohabía más. Estábamos centrados en lo que tocaba. Los temas de denuncias y otras cosas no tenemos nada que ver. Queríamos pasar en el campo y no fue así y evidentemente fue una pena. No hay que darle más vueltas y ya está.

¿Les ha quedado claro a los jugadores si hubo o no alineación indebida del Barça?

—La verdad creo que se hizo una denuncia. La rechazaron y tampoco es que lo tengamos claro. Lo único que sabemos es que hemos quedado eliminados.

Este año hemos pasado de esa polémica de alineación indebida al tema VAR. ¿Se hace raro?

—Cuando metes un gol siempre hay unos minutos de incertidumbre. Es una herramienta que es buena para el fútbol y creo que este año además a nosotros nos ha beneficiado más que perjudicado. Creo que hay detallitos que hay que pulir pero es una herramienta válida y necesaria. Sí estoy a favor la verdad.

Ya para terminar. Toca mojarse, ¿marcador contra el Madrid?

—Con un 1-0 me vale... (se ríe). Con ganar me vale. Si hacemos las cosas como sabemos vamos a tener opciones seguro.